La Audiencia Nacional frena su entrega a Marruecos con una medida cautelar mientras se revisa su solicitud de asilo
Ceuta – El agente de policía marroquí con plaza en Tánger que solicitó asilo político en la frontera de Ceuta durante la madrugada del pasado lunes permanecerá, por ahora, en territorio español. Así lo ha determinado la Audiencia Nacional, que ha aceptado de manera cautelar el recurso presentado por su defensa, paralizando temporalmente cualquier intento de devolución a Marruecos hasta que se emita una resolución firme sobre su solicitud de protección internacional.
La petición de asilo se realizó en el marco del procedimiento denominado «asilo en frontera», que se aplica cuando la solicitud se formula en el mismo momento del ingreso al país. El caso ha pasado ya por tres trámites consecutivos. En primer lugar, la solicitud fue denegada. Posteriormente, se presentó un reexamen que también fue rechazado. Finalmente, la defensa del agente recurrió ante la Audiencia Nacional, que ha dictado la medida cautelar que le permite permanecer en España mientras se estudia su caso.
Hasta este momento, el policía había permanecido en la oficina de asilo del paso fronterizo del Tarajal, en Ceuta, a la espera de resolución. Con la medida adoptada, el agente queda en libertad de movimiento dentro del territorio nacional, según confirmó la Jefatura Superior de Policía, abandonando así el puesto de espera en la frontera donde había permanecido desde la madrugada de su llegada.
El caso es poco habitual en Ceuta, donde las solicitudes de asilo en frontera son menos frecuentes que en Melilla. Precisamente por ello, se especula que el agente eligió esta vía pensando que se trataría de un procedimiento de asilo territorial, que se aplica cuando el solicitante entra de manera irregular y posteriormente formaliza su petición de protección, como sucede con inmigrantes que cruzan la valla o llegan nadando.
De no resolverse su caso en el plazo de un mes, el solicitante podría ser derivado a la península y trasladado a un Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) durante la tramitación de su expediente.
El proceso sigue su curso y, por ahora, el agente marroquí continuará en España bajo la protección de la legislación de asilo vigente, a la espera de una decisión definitiva.
