Los socialistas coinciden con el Gobierno de la Ciudad en que se deben restringir aún más los contactos y la interacción social y por ello han dado su visto bueno al cese de toda actividad no esencial a partir de las 18:00 horas
Según ha explicado el secretario general del PSOE de Ceuta, Manuel Hernández, atendiendo a los preocupantes datos de la situación epidemiológica en Ceuta, los socialistas brindan su apoyo al Gobierno de la Ciudad de cara a las nuevas restricciones que piensa imponer para doblegar la curva de contagios y también la de fallecidos. «Esto puede tener un cierto impacto en otros niveles en cuanto a actividad económica y actividad social, pero entendemos que lo primero tienen que ser las vidas de los ceutíes y las ceutíes», ha indicado Hernández. «Hasta que no veamos que la evolución de la pandemia nos lleva a doblegar firmemente la curva de contagios, vamos a seguir manteniendo criterios de firmeza y contundencia a la hora de aplicar las restricciones«, ha añadido.
De este modo, el líder socialistas ha explicado que su partido aboga «por el cierre de las actividades relacionadas con hostelería y comercio a las 18:00 horas hasta que se vea que se doblegan las curvas de fallecimientos y contagios» porque lo que quieren en Daoiz es que «se reduzca el nivel de contacto y de interacción social para ver si esto tiene elementos de freno sobre los datos que estamos teniendo relacionados con la pandemia».
Además de apoyar la imposición de un cese diario para la actividad no esencial a partir de las 18:00 horas, el PSOE de Ceuta ha solicitado al Gobierno local que «en las reuniones que mantengan con la Universidad de Granada» apoye «lo que es una reivindicación de una parte importante de la comunidad universitaria de nuestra ciudad y pasar a un escenario de docencia virtual«. Otra medida que va encaminada a reducir el contacto y la interacción social y que tiene la misma razón de ser que la anterior: frenar la transmisión de la COVID-19.
Finalmente, Hernández ha señalado que el PSOE de Ceuta mira «en primer lugar por la salud» y es lo que antepone a «cualquier tipo de interés y de criterio que vaya en contra de salvar vidas humanas».