El Pleno del Senado no logró elegir este martes a los cuatro miembros del Consejo de Administración de RTVE propuestos por el Partido Popular (PP), al no alcanzar la mayoría de dos tercios requerida en la primera votación, que fue secreta y realizada mediante papeletas. Como resultado, se ha programado una segunda votación para el jueves a las 13:00 horas, donde bastará con una mayoría absoluta para aprobar los nombramientos.
Los candidatos propuestos por el PP incluyen al exdirector de TVE, Eladio Jareño; el exdiputado y exsenador Rubén Moreno; la periodista Marina Vila; y el exdirector de la Agencia Tributaria durante el gobierno de José María Aznar, Ignacio Ruiz Jarabo. En la votación, estos candidatos obtuvieron 143 votos a favor, 111 en blanco y tres nulos.
Durante el turno de portavoces, el senador del PP, Antonio Silván, criticó la situación afirmando que «hoy no acaban con el bloqueo de RTVE», sino que «quieren consumar el asalto a RTVE». Silván expresó su indignación por lo que considera un ataque a la libertad de información y a las instituciones públicas, especialmente en un momento crítico como el actual.
Por otro lado, el portavoz del PSOE, Gabriel Colomé, defendió la votación como un paso hacia un Consejo más plural en la historia de RTVE, acusando al PP de intentar manipular y controlar la corporación, una práctica que, según él, han llevado a cabo siempre que han estado en el poder.
Desde Junts, el senador Eduardo Pujol destacó la importancia del servicio público de RTVE, criticando su actual ineficacia y sugiriendo que la corporación necesita reformas profundas para recuperar su prestigio y audiencia, especialmente en Cataluña.
María del Mar Caballero, de Unión del Pueblo Navarro (UPN), anunció su voto en blanco, aunque reconoció la idoneidad de los candidatos. Sin embargo, criticó al Gobierno por modificar el proceso de elección de consejeros, lo que, según ella, garantiza un control absoluto sobre otro ente público.
La segunda votación del jueves será crucial para determinar el futuro inmediato de RTVE y su Consejo de Administración. La situación actual refleja las divisiones políticas en torno a la gestión de los medios públicos y plantea preguntas sobre la independencia y pluralidad de la corporación.