«Los médicos de Familia han realizado un trabajo encomiable y en los últimos meses han ofrecido mucho más de lo que está recogido en su contrato», denuncia el Sindicato
El Sindicato Médico de Ceuta ha remitido una nota de prensa en la que «sale en defensa de los especialistas del área de Medicina de Familia ante la resolución de la última Bolsa de Empleo publicada por el INGESA«. Según la entidad, en el documento se informa de que «la experiencia profesional realizada por estos profesionales en otras áreas, como Urgencias, Pediatría, el 061 o el SUAP, contará solamente un tercio en comparación con la llevada a cabo en su categoría de Medicina de Familia».
Una cuestión que, para el sindicato, «coloca en una situación muy complicada a estos facultativos, que han sido y son uno de los principales pilares en la lucha contra la COVID-19». La bolsa, para el organismo local, «no tiene en cuenta la pandemia actual ni la situación específica de Ceuta en torno a la sanidad y perjudica claramente a los médicos pertenecientes a Medicina de Familia, con un baremo excluyente y humillante para esta categoría profesional».
Asimismo, el Sindicato Médico defiende que «los médicos de Familia han realizado un trabajo encomiable y en los últimos meses han ofrecido mucho más de lo que está recogido en su contrato». Por ello, el organismo local estima que «es justo que no se les damnifique de cara a futuros empleos por ejercer su profesión y realizar una labor de riesgo en otras áreas, como Urgencias, que estaban necesitadas de toda la ayuda posible».
«En la bolsa de empleo temporal, publicada por el INGESA por resolución (sin acuerdo ni pacto con los sindicatos, a pesar de los meses de negociación), se penaliza a los profesionales de Familia de cara a futuro por haber estado trabajando en otras áreas, una labor que estos médicos están obligados a realizar de manera habitual en Ceuta por la falta de médicos en algunos servicios. Esto se traduce en que los médicos de Familia de Ceuta, especialistas formados vía MIR durante 4 años, ven como su desempeño cuenta menos que el de sus compañeros, siendo desplazados ante la llegada de otros profesionales de la misma área a la ciudad», denuncia el comunicado remitido por el sindicato.
El organismo recuerda que, en Ceuta, «los facultativos de Medicina Familiar y Comunitaria llevan años siendo utilizados por el INGESA para desempeñar la labor de Pediatría, área de difícil cobertura en Ceuta». «También sucede una realidad similar ante la ausencia de la especialidad de Urgencias en Ceuta, en la que una gran cantidad de médicos de Familia son capacitados para ejercer como médicos de urgencias hospitalarias y extrahospitalarias (061 y SUAP)», denuncia el comunicado.
De esta manera, el sindicato sostiene que «el colectivo de especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria ha sido infravalorado, pisoteado y ninguneado por los servicios centrales del INGESA, que actúa como si fuera un ente extranjero, ajeno a la realidad actual que está atravesando Ceuta» y que esta situación que «lleva años sucediendo» en la ciudad, se haca todavía más patente «debido a la sobrecarga de trabajo de ciertas áreas y el colapso sanitario de momentos específicos».
Finalmente, «el Sindicato asegura que los profesionales sanitarios no son ‘pañuelos de usar y tirar’ y que el INGESA debe adecuar su postura al complicado escenario que existe, asegurando que sus trabajadores no sean discriminados por realizar correctamente su labor en otras áreas que lo soliciten, pues esto podría crear un precedente muy peligroso».