El organismo confía en que los recambios de altos cargos del Instituto sirvan como punto de partida para modificar «su apática forma de realizar la gestión sanitaria en Ceuta y de que se abra la oportunidad de diálogo para mejorar las condiciones de los profesionales y pacientes de la Ciudad Autónoma»
Según un comunicado remitido por el Sindicato Médico de Ceuta, los cambios que se están produciendo en la cúpula de INGESA, con la renovación de los puestos de director y subdirector, venían siendo demandados por el propio organismo local y por la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos de España (CESM). «Estos movimientos son tomados por el Sindicato Médico de Ceuta como una posibilidad de que el INGESA modifique su apática forma de realizar la gestión sanitaria en Ceuta y de que se abra la oportunidad de diálogo para mejorar las condiciones de los profesionales y pacientes de la Ciudad Autónoma», señala el sindicato.
De esta forma, el organismo local confía en que «esta depuración de altos cargos del INGESA sea un primer paso para un cambio de actitud por parte de la Administración, la cual consideran que debe comenzar este nuevo camino escuchando las reivindicaciones que desde la ciudad les hacen llegar de manera continua». «El último grito de socorro, pero no el único, viene de los médicos de Urgencias del Hospital Universitario de Ceuta, el cual cada día cuenta con menos profesionales para hacer frente a una situación insostenible que se ha agravado con la pandemia», apunta el escrito.
«A esta demanda se le suma la petición de recuperar el área de Urgencias Pediátricas, una supresión que repercute negativamente en la calidad asistencial de niños y adultos y que provoca incrementar la sobrecarga de unos profesionales que notan desde hace meses el colapso sanitario«, destaca el Sindicato Médico que, además, explica que «el cierre de este servicio se realizó alegando la necesidad del área de forma coyuntural por la pandemia, pero, más de un año después, este argumento suena a excusa para seguir manteniendo la plantilla sin los refuerzos necesarios que logren una atención al paciente de calidad y unas condiciones laborales dignas para los sanitarios».
Asimismo, «hay que añadir aquellas reclamaciones que llevan años realizándose desde el órgano sindical sin respuesta afirmativa por parte del INGESA, cuyos directivos han sido recientemente relevados», precisa el comunicado. «La principal es la necesidad de considerar Ceuta como un área de difícil desempeño médico, una medida esencial para frenar la fuga de facultativos que hace que nuestra sanidad se quede coja y de la que derivan muchos de los grandes problemas de los profesionales locales de este ámbito. Formación reglada, una bolsa de empleo justa y negociada, una jornada laboral digna, turnos de guardias equiparables a los del resto del territorio…», indica el organismo.
Finalmente, el Sindicato Médico «espera que esta nueva dirección no se quede solo en un cambio de personas, sino que se traduzca en una reforma completa de actitud y que el INGESA comience desde hoy a tomar cartas en el asunto para frenar las grandes dificultades de la Ciudad Autónoma de Ceuta en materia de salud«. «De esta forma, el órgano local se muestra predispuesto al diálogo y solicita una mesa de negociaciones en la que poder comenzar a trabajar unidos por el bien de la Sanidad de Ceuta», remata el comunicado.