El Sindicato Médico ha enviado un comunicado a los servicios centrales del Ingesa en Madrid para alertar, una vez más, de la «insostenible situación de la UCI local» y amenaza con emprender acciones legales contra el Ministerio si la Administración no reacciona
El Sindicato Médico de Ceuta (SMC) ha enviado una carta urgente a la Dirección nacional del Ingesa para denunciar el precario escenario de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la ciudad. A través de su abogado, el letrado José Vázquez Ávila, el sindicato profesional se ha comunicado con la Administración sanitaria con sede en Madrid para que tome debido conocimiento y adopte las medidas oportunas para corregir «una situación que solo empeora con el tiempo, a pesar de las constantes quejas de los trabajadores y sindicatos a las autoridades competentes del organismo ministerial».
Desde hace meses, el sindicato está denunciando por diversos canales «el contexto insostenible que se está viviendo en el Hospital Universitario de Ceuta (HUCE), dando visibilidad a las reivindicaciones de los sanitarios, hastiados por la falta de respuesta por parte de la Administración». Específicamente, se ha alertado de que en la UCI del HUCE hay una «acuciante necesidad de reforzar la plantilla con intensivistas, una situación que ha empeorado con las últimas bajas en el servicio», situación que, han recordado, «se trasladó personalmente a la nueva directora del Ingesa, Belén Hernando, en una reunión por videoconferencia mantenida recientemente».
«Además de la salida de los dos médicos extracomunitarios que estaban contratados para reforzar la plantilla de la UCI, los cuales han permanecido escasos meses por las precarias condiciones laborales; esta semana se ha presentado la baja de otra intensivista, que además era la coordinadora de trasplantes», han denunciado. El traslado de esta última se sabía desde hacía meses, cuando le concedieron el permiso de movilidad a Andalucía. El Sindicato considera intolerable que, teniendo conocimiento con antelación de esta situación, el Ingesa no haya considerado la contratación de nuevos especialistas en cuidados intensivos para apoyar a los exhaustos intensivistas de su hospital.
«A la merma de la plantilla de cuidados intensivos, que ha llegado a tener únicamente tres especialistas activos durante la pandemia, se le suma la complicación de que la edad de los facultativos del servicio supera los 60 años de media, por lo que no se prevé una mejor situación a futuro si la Administración sigue sin contratar nuevos médicos», critica.
Tras la denuncia presentada por el Sindicato Médico de Ceuta ante los medios el pasado mes de abril, el sindicato afirma que el Ingesa aseguró que iba a reforzar el servicio con la incorporación de dos facultativos. No obstante, señalan que no ha llevado a cabo nuevas contrataciones para cubrir las plazas, sino que la Dirección ha decidido mover profesionales de otros servicios para atender la demanda existente en la UCI. Una solución que el sindicato asegura que es «otro paño caliente ante una quiebra estructural que se está agravando por la pandemia, pero que ya existía anteriormente y necesita medidas estables para hacerle frente».
Por todo lo anterior, el SMC ha recordado al Ingesa su reivindicación de que Ceuta debe ser clasificada como ‘Área de difícil desempeño médico’ y comenzar a promover incentivos que hagan atractiva a la ciudad como destino para que los médicos desempeñen su actividad laboral a largo plazo. «Una medida que debe acompañarse de mejoras urgentes en las condiciones de todos los trabajadores del hospital y en la escucha activa a los sanitarios para lograr una comunicación efectiva que recupere la calidad asistencial y laboral de la sanidad ceutí», aconsejan.
Por último, el documento enviado advierte que es intención del Sindicato el tratar este asunto de forma consensuada, logrando un acuerdo satisfactorio para las dos partes. Sin embargo, «si el Ingesa continúa sin dar signos de cooperación ante la clara crisis sanitaria que se está viviendo, el Sindicato se reserva su derecho a emprender acciones judiciales contra el Ministerio de Sanidad para la defensa de la salud de los ceutíes, máxime cuando se pone en jaque a servicios tan críticos como el de la UCI».