El programa para la Atención Integral a Personas con Enfermedades Avanzadas tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de pacientes en proceso de final de vida y de sus familiares a través de la intervención de Equipos de Atención Psicosocial (EAPS) en hospitales, residencias y en domicilios de toda España. Con la colaboración del Ministerio de Sanidad, desde 2008, el Programa ha atendido a más de 650.000 personas: 290.181 pacientes y 372.630 familiares.
Mayor bienestar y mejor estado de ánimo. Estas son las principales conclusiones de la última evaluación que, coincidiendo con el Día Mundial de los Cuidados Paliativos, ha presentado el programa para la Atención Integral a Personas con Enfermedades Avanzadas de la Fundación ”la Caixa”. Todo ello tras evaluar la efectividad de las intervenciones de los Equipos de Atención Psicosocial (EAPS) en España con datos recogidos durante 2021 y 2022.
La evaluación, impulsada por la Fundación ”la Caixa” y realizada por la Cátedra de cuidados paliativos de la Universidad de Vic – Central de Cataluña (UVIC/UCC) juntamente con el Institut de Recerca Germans Trias i Pujol (IGTP), cuenta con una muestra de 6.471 pacientes en situación de enfermedad avanzada. La edad media de las personas atendidas es de 73 años. Del total, el 52% son mujeres y el 48% hombres. El 61% padece una enfermedad oncológica y el 39% otro tipo de patología.
Una de las principales conclusiones de la evaluación impulsada por el Programa es la mejora del ánimo: en la primera visita, el 78% se sentía regular o mal. Después de la intervención de los Equipos de Atención Psicosocial (EAPS), este porcentaje se reduce a menos de la mitad.
El aspecto relevante es que, tras recibir atención psicológica, social y espiritual, un 66% considera que sus creencias y valores le ayudan a enfrentarse a la situación, ya que se refuerzan las fortalezas y recursos que tienen las personas en situación de final de vida.
La sensación de tristeza también mejora tras la intervención psicosocial: en la primera visita, cerca del 50% de las personas se sentían bastante o muy tristes; después de recibir atención el porcentaje se reduce al 17%.
En global, el Programa contribuye a mejorar las dimensiones psicológicas (síntomas como ansiedad, depresión, malestar, sufrimiento e insomnio), las sociales (capacidad de relación y de comunicación con la familia y con el entorno) y las consideradas como esenciales (espiritualidad, dignidad, sensación de paz y de perdón, y grado de aceptación de la enfermedad).
“Esta evaluación pone de relieve la importancia de la mirada integral: se deben atender todas las dimensiones en las situaciones de enfermedad. Nuestro objetivo como profesionales es contribuir a que el cierre de la biografía se dé en las mejores condiciones posibles y que la atención pueda ser integral en todos los casos, ya que todas las personas merecen un final de vida sereno y digno”, destaca el Dr. Xavier Gómez-Batiste, catedrático de medicina paliativa y director científico del programa para la Atención Integral a Personas con Enfermedades Avanzadas de la Fundación ”la Caixa”.
Un programa pionero y en constante innovación
Desde hace 14 años, el Programa ofrece una atención de calidad a las personas que se encuentran en situación de final de vida y trabaja por la humanización de los cuidados en situaciones de cronicidad avanzada y vulnerabilidad social y, a finales de este año, ya se estará desarrollando en todas las provincias de España y en las dos ciudades autónomas.
En Ceuta, el Programa lo desarrolla el EAPS perteneciente a la AECC que actúa en el Hospital Universitario de Ceuta, la Residencia Nuestra Señora de África, la Residencia de los Hermanos Franciscanos de Cruz Blanca y la Residencia Gerón.
Enmarcado en la Estrategia de Cuidados Paliativos del Sistema Nacional de Salud, este Programa consolida su misión de complementar el modelo actual de atención a las personas que se encuentran al final de su vida para lograr cubrir tanto la esfera emocional, social y espiritual del paciente y su familia como la atención al duelo y el apoyo a los profesionales de cuidados paliativos.
Desde su puesta en marcha en 2008, en el global de España, el Programa ha atendido a más de 650.000 personas: 290.181 pacientes y 372.630 familiares, interviniendo en centros sanitarios, equipos domiciliarios y residencias. De la mano del Ministerio de Sanidad y las distintas consejerías de salud, este año se ha consolidado el Programa que se implementará en todas las provincias a través de un total de 65 Equipos de Atención Psicosocial (EAPS) formados por psicólogos, trabajadores sociales, enfermeros, médicos, agentes pastorales y voluntarios.
Con su labor de atención, sensibilización, investigación y formación, el Programa quiere contribuir a que el acompañamiento psicosocial y espiritual en final de vida sea un derecho para todas las personas.
Una metodología con una evaluación contrastada
Resulta esencial evaluar la contribución de los Equipos de Atención Psicosocial (EAPS) a la mejora del bienestar de las personas que están en situación de final de vida mediante el análisis de la efectividad de la atención. Para extraer los resultados y llevar a cabo el análisis, el equipo de investigadores se ha basado en el modelo de atención a las necesidades psicosociales, el PSICPAL y el uso, entre otras, de la escala de Evaluación de Necesidades Psicosociales y Espirituales (ENP-E), diseñada y validada en este grupo de población y que resulta útil para la evaluación y monitorización sistemáticas de necesidades psicosociales de personas con enfermedades avanzadas o al final de la vida en servicios de salud, sociosanitarios y sociales.