La ciudad de Cuenca, en Ecuador, es el escenario de la XIX Cumbre Iberoamericana, un evento que este año se caracteriza por la escasa participación de líderes internacionales. De los 22 jefes de Estado y de Gobierno invitados, solo cuatro han confirmado su asistencia, incluyendo al rey Felipe VI de España.
Esta es la primera vez en tres décadas que tan pocos mandatarios asisten a la cumbre. A pesar de que desde 2014 el evento se celebra cada dos años para fomentar la participación, la tendencia ha sido una disminución en la presencia de líderes.
Además del anfitrión, el presidente ecuatoriano Daniel Noboa, participan Luis Abinader de República Dominicana y Marcelo Rebelo de Sousa de Portugal. Sin embargo, la ausencia de otros líderes complica la posibilidad de alcanzar una declaración final consensuada, una tradición desde la primera cumbre en Guadalajara en 1991.
El presidente argentino, Javier Milei, había confirmado su asistencia pero optó por viajar a Estados Unidos para reunirse con Donald Trump. Otros líderes, como Dina Boluarte de Perú y Gabriel Boric de Chile, están en la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), mientras que Luiz Inácio Lula da Silva de Brasil se prepara para la cumbre del G20 en Río de Janeiro.
Gustavo Petro de Colombia canceló su participación debido a las inundaciones en su país, y los presidentes de Cuba y Bolivia, Miguel Díaz-Canel y Luis Arce, respectivamente, también decidieron no asistir debido a situaciones internas complicadas. Santiago Peña de Paraguay suspendió su viaje debido a la inestabilidad política en Ecuador.
Felipe VI y su agenda en Cuenca
El rey Felipe VI llegó a Cuenca acompañado por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares. Durante su estancia, visitará las Escuelas de Fútbol en el Complejo Deportivo La Gloria, una iniciativa educativa impulsada por la ONG ‘Junta de Beneficencia de Guayaquil’ y el Club Atlético de Madrid.
Además, el rey participará en la presentación de la Tarjeta Iberoamericana de Discapacidad, un proyecto que busca reconocer los derechos de las personas con discapacidad en la región. También clausurará el XV Encuentro Empresarial Iberoamericano, donde se espera aprobar un Manifiesto por la empleabilidad.
La cumbre abordará temas cruciales como la seguridad, la movilidad humana, la homologación de títulos universitarios y la financiación al desarrollo. España ha sido elegida como sede de la próxima cumbre, lo que implica la organización de diversas conferencias y reuniones preparatorias durante los próximos dos años.