Desde junio del 2020 España ha presidido el Foro internacional “Maritime Theater Missile Defence”, mostrando el compromiso nacional con el desarrollo a nivel internacional de la capacidad de defensa integrada antimisil en el entorno marítimo.
Durante el año de presidencia española los aspectos más destacados han sido los siguientes:
– Éxito en el ejercicio de defensa antimisil integrada (IAMD) más relevante de Europa, “At Sea Demonstration/Formidable Shield-21”. En él, se pusieron a prueba todos los desarrollos y avances perseguidos por el Foro hasta la fecha, orientados hacia la interoperabilidad de los sistemas antimisil de las marinas de los países miembros. Además, la fragata española “Cristobal Colón” efectuó con éxito un lanzamiento de misil contra un blanco supersónico con altura “roza-olas” a casi tres veces la velocidad del sonido y ejerció de buque de mando desde donde se dirigió todo el ejercicio.
– Reorganización de los mecanismos de trabajo y adaptación de los Grupos de Trabajo para cumplir todos los objetivos marcados en los proyectos en desarrollo, superando así todas las adversidades que ha supuesto la pandemia durante toda la presidencia española.
– Implementación de la “Estrategia de enlace con la OTAN” (NATO Engagement Strategy) en la que cabe destacar la presentación impartida por el Presidente del Foro, el Contralmirante Rubén Rodríguez Peña, al Comité Militar de la OTAN el pasado mes de febrero. En ella explicó los objetivos y avances del trabajo desarrollado así como su impacto a favor de una defensa antimisil más capaz.
En la próxima reunión, que se celebrará en Las Palmas, España cederá la Presidencia del Foro a Francia.
Sobre el Foro MTDM
Frente a la creciente amenaza de los misiles balísticos y los misiles antibuque, Estados Unidos, Bélgica, Canadá, Reino Unido, Italia, Alemania, Holanda, Australia, Dinamarca, Francia, Noruega y España optaron por compartir conocimiento operativo y tecnológico, además de la experiencia.
En el entorno marítimo los miembros avanzan en la interoperabilidad de sus capacidades antimisil con la finalidad de poder integrarlas en una fuerza multinacional y ser capaces de defenderse simultáneamente contra estas amenazas, usando una red común de mando y control.