España se destaca en la lucha contra la obesidad, según la Federación Mundial de la Obesidad, gracias a sus políticas públicas enfocadas en el tratamiento del sobrepeso y enfermedades relacionadas. Estas medidas han llevado a una mejora en las proyecciones para 2030, donde se estima que 18,75 millones de adultos tendrán sobrepeso y 5,3 millones serán obesos.
Con motivo del Día Mundial de la Obesidad, celebrado bajo el lema ‘Cambiar los sistemas para vidas más saludables’, la Federación ha actualizado su Atlas de la Obesidad 2025. Este informe revela que dos tercios de los países carecen de políticas adecuadas para enfrentar este desafío, pero España es una excepción notable.
Las proyecciones muestran una tendencia a la baja en comparación con estudios anteriores, como el ENE-covid, que indicaba tasas más altas de sobrepeso y obesidad. El atlas utiliza el Índice de Masa Corporal (IMC) como indicador principal, aunque cada vez más expertos sugieren otros métodos como el perímetro abdominal para medir complicaciones.
Comparativamente, países como Francia y Reino Unido presentan tasas de sobrepeso y obesidad más altas. En contraste, España ha implementado planes nacionales y encuestas de prevalencia que han contribuido a mejorar estas cifras.
Un enfoque multidisciplinar es clave para abordar la obesidad, que no solo se debe a una mala alimentación o falta de ejercicio. La Sociedad Española de Obesidad y otras organizaciones insisten en tratarla como una enfermedad crónica y multifactorial, vinculada a comorbilidades como la diabetes y enfermedades cardiovasculares.
Además, la obesidad está estrechamente relacionada con la salud mental, aumentando significativamente el riesgo de ansiedad y depresión. También afecta al aparato digestivo, incrementando el riesgo de diversas patologías, según la Fundación Española del Aparato Digestivo.
La Sociedad Española de Medicina Interna aboga por reconocer la obesidad como una enfermedad crónica compleja, requiriendo un enfoque integral que incluya dieta, ejercicio, calidad del sueño, y en algunos casos, tratamientos farmacológicos o cirugía bariátrica.
El Consejo General de Colegios de Farmacéuticos también ha lanzado iniciativas para promover estilos de vida saludables y revertir la tendencia creciente de obesidad, que se ha duplicado en adultos y cuadruplicado en niños desde los años 90.