Greenpeace ha realizado la investigación “La desinformación en Whatsapp” para conocer qué bulos circulan por la aplicación de mensajería durante la campaña electoral, dónde ponen el foco y cuál es el origen de los mismos.
El estudio de Greenpeace se realizó sobre más 300 fakenews o bulos que circulan por listas de difusión de WhatsApp. Los mensajes se clasificaban en función de cuál era el foco de la desinformación, el nivel de crispación que había generado al compartirse y la fuente generadora. Los bulos cuyo contenido señalan a partidos políticos son los más numerosos (40%) y además los que más crispación provocan, seguido de nacionalismos, xenofobia, género, islamofobia, ONG y el sistema electoral.
Sobre el origen de la desinformación, de la investigación se desprende que más del 30% de los mensajes analizados no tienen una fuente conocida. Es decir, son pantallazos de conversaciones, memes o imágenes que no redireccionan a ninguna web y comprobar quién ha creado esos contenidos es casi imposible. El resto de noticias proceden mayoritariamente de plataformas o webs cuya deontología periodística ha sido cuestionada. En total, se ha contabilizado casi medio centenar de portales o webs que generan este tipo de informaciones. Las tres que destacan en el estudio son Okdiario, Mediterráneo Digital y Libertad Digital.
Greenpeace te permite consultar los bulos analizados
Además, el informe recoge una muestra de los bulos destacados por su temática en una una plataforma interactiva que simula a la red social WhatsApp y con la que se puede navegar como si se tratase de la propia aplicación. Todo el contenido, memes y noticias son reales. Greenpeace también incluye unas recomendaciones para evitar la desfinformación y los bulos.
La preocupación de la organización por la desinformación radica en que para el 95,1 % de la población española la mensajería instantánea es el canal preferido para comunicarse, lo que ha transformado WhatstApp en un “medio de comunicación” muy eficaz para viralizar la desinformación. Además, España es el país europeo donde más se cree en los bulos. Un 86% de la población no es capaz de distinguir una información verdadera de una falsa, a pesar de que el 60% de la población española cree lo contrario. WhatsApp ha sido una herramienta que ha contribuido notablemente a lograr victorias electorales como la de Bolsonaro en Brasil, cuyas políticas ponen nuestras vidas y el planeta en riesgo.
“El auge de la desinformación que circula por las redes sociales supone una dificultad añadida a la hora de defender el medio ambiente, la democracia y la paz, ya que confunden a gran parte de la población, limitando su capacidad de decidir libremente el sentido del voto, en base a una información veraz, y no a mensajes falsos”, ha declarado Javier Raboso, responsable del programa de Greenpeace de Democracia.