Meritocracia “empotrada” por el falo consanguíneo. Y, ¿por qué no? PARAmilitarismo y “PARpoliticarismo” que enclaustra su perorata metálica de amplio alcance en la piel de aquellos que buscan sub(exi)sistir. No es un argumento convincente. Lo sé. Pero, aún menos lo es ese grupo de PARÁsitos que se alimentan de la gran “col de Bruselas”. La que actúa como madre dictatorial.
La “banderilla” rancia, que decora los cálidos salones donde se bebe a costa de los ciudadanos y se decide sobre sus destinos, actúa de acicate. DOLOR y PLACER. La ceguera surge cuando los cerebros se apagan condicionados por el miedo. Honestos que focalizan su ira en la microdelincuencia con base étnico/cultural y se olvidan del nivel macro. Corrupción institucional(izada).
Desafío el interés general con mi desidia. La solidaridad y la hermandad no van acompañadas de la distinción entre derecho humano y ciudadano. ¿Falta de futuro o certeza? Vivir para morir en la fantasía creada bajo el paradigma de “bienestar europeo”. BienMalhechores.
[Mediachores: aquellos que se basan en la hipocresía de los que (no) acogen y (no) marginan y (no) explotan].
La excesiva fiscalidad como método neocolonialista persigue dañar a los pueblos “bárbaros” de una manera cada vez más inva(ci)siva: mental. Generación de la necesidad: de consumo.
Los der(s)echos humanos molestan a unos y a otros. Despotricar a modo de vómito narrativo: GITANOS (romaníes, sinti), MOROS (árabes), NEGROS (afroamericanos), SUDACAS (latinos)… Es lo mismo y (no) da igual.
¡Atención! Partido a las 18h en SUBURBIOS stadium
Se enfrentan pobres contra pobres. Los ricos toman asiento en la zona vip para ver el espectáculo esperpento. Apuestas para entretenerse junto a la barra del bar: ¡Yo voy con los negros que la tienen más grande! Grita uno. ¡Yo me quedo con aquel gitano que sabe bailar! -Se oye por detrás-.
Clasificados para la final: Cristos pobres versus Mahomas pobres. Ambos derrotaron en sus respectivas semifinales a budistas e hinduistas pobres. ¿Gana(Perde)dores? Los de siempre. MISERABLES. ¡Gooooooool!