Desde que en febrero de 2023 se trasladó a Dubái por recomendación de su madre, la infanta Elena, Felipe Juan Froilán de Marichalar y Borbón ha encontrado estabilidad en su vida profesional y personal. Su residencia en Emiratos Árabes Unidos, donde trabaja en la empresa petrolera Abu Dhabi National Oil Company, le ha permitido mantenerse alejado de las polémicas que marcaron su etapa en España. Ahora, su integración en este nuevo entorno ha dado un paso más: ha decidido sumarse a la práctica del Ramadán.
Según informa la revista Lecturas, Froilán comenzó el ayuno el pasado 28 de febrero, coincidiendo con La noche de la duda, momento en el que se inicia oficialmente el Ramadán para los musulmanes. Sin embargo, su motivación no responde a una conversión religiosa, sino a un gesto de respeto y empatía hacia sus compañeros de trabajo, tal y como explicó el periodista Aurelio Manzano en el programa Todo es mentira.
Un gesto de adaptación cultural
“Lo hace porque quiere empatizar con sus compañeros de trabajo. Si todos están haciendo el Ramadán, él no va a llegar y se va a sacar una comida. Ahí donde vayas, haz lo que veas”, señaló Manzano, quien elogió la actitud del nieto del rey Juan Carlos.
Además, esta no sería la primera vez que Froilán participa en esta tradición. Según la misma fuente, ya habría realizado el ayuno en dos ocasiones anteriores, demostrando su disposición a adaptarse a las costumbres del país en el que reside.
El Ramadán, una de las prácticas más importantes del islam, implica la abstención de comida, bebida, tabaco y relaciones desde el amanecer hasta la puesta de sol, aunque contempla excepciones para mujeres embarazadas, enfermos, ancianos, viajeros y niños.
Su vida en Dubái: trabajo, estudios y autonomía financiera
La estancia de Froilán en Dubái no solo le ha brindado estabilidad, sino que también ha marcado un punto de inflexión en su trayectoria. Tras abandonar su puesto en la Cumbre del Clima, el sobrino del rey Felipe VI encontró trabajo en la petrolera emiratí y, además, ha optado por continuar su formación con un máster a distancia en una universidad americana.
En cuanto a su economía, la revista Semana destaca que es él mismo quien se hace cargo de sus gastos, sin recurrir al patrimonio de su familia. Comparte vivienda con un compañero de trabajo, con quien divide los costes de su residencia.
Esta nueva etapa en Dubái parece haber llevado a Froilán a un estilo de vida más discreto y centrado, lejos del foco mediático que lo acompañó en España. Su decisión de participar en el Ramadán es un reflejo de su voluntad de integración en la sociedad en la que ahora desarrolla su vida.