El fundador y consejero delegado de Glovo, Óscar Pierre, compareció este martes ante la jueza del Juzgado de Instrucción 31 de Barcelona. La declaración se produjo un día después de que la empresa anunciara un cambio radical en su modelo laboral, comprometiéndose a contratar a sus repartidores como empleados en lugar de trabajadores autónomos.
La comparecencia de Pierre, que duró apenas 15 minutos, fue parte de un proceso penal en fase de instrucción iniciado por una denuncia del Ministerio Público. Esta denuncia acusa a Glovo de presuntos delitos relacionados con los derechos de los trabajadores, específicamente el uso de ‘falsos autónomos’.
El Ministerio Fiscal sostiene que Glovo ha estado menoscabando los derechos de sus trabajadores al mantenerlos bajo la condición de autónomos, a pesar de que el Tribunal Supremo español declaró ilegal esta práctica en 2020. La investigación busca determinar si Glovo continuó utilizando este modelo después de la sentencia.
En respuesta a las acusaciones, la defensa de Pierre argumenta que la empresa ha adaptado su modelo para cumplir con las condiciones establecidas por el Supremo. Sin embargo, la Fiscalía mantiene que la relación laboral sigue siendo de ‘falsos autónomos’, ya que los sueldos y cotizaciones a la Seguridad Social no reflejan adecuadamente el trabajo realizado por los repartidores.
Un día después del anuncio del nuevo modelo laboral, Glovo reafirma su compromiso con España y el impulso de la economía digital. La empresa asegura que el cambio se implementará en más de 900 ciudades donde opera, afectando a todas las verticales de su aplicación. Glovo promete mantener la experiencia de usuario y la colaboración con restaurantes y establecimientos asociados.
Además, la compañía ha anunciado la apertura de una mesa de diálogo con agentes sociales para garantizar que el proceso de transición se realice con consenso. Este foro estará abierto a otros operadores del sector, permitiendo que se sumen a los acuerdos alcanzados y realicen transiciones similares.
Este cambio de modelo laboral es visto como un paso importante hacia la regularización de las condiciones laborales en el sector de la economía digital. Sin embargo, el proceso legal en curso podría tener implicaciones significativas para Glovo y otras empresas que operan bajo modelos similares.