El fútbol base de Ceuta vuelve a verse empañado por la violencia tras la suspensión del encuentro de la Regional Preferente entre el Inter Ceuta y el Sporting de Ceuta, disputado en el campo federativo José Benoliel. Lo que comenzó como un partido normal de la jornada siete terminó convirtiéndose en un lamentable episodio de agresiones y caos.
Una segunda mitad marcada por la tensión
El encuentro transcurría sin problemas hasta la segunda mitad, cuando la tensión en el terreno de juego comenzó a aumentar. Con un marcador de 0-2 favorable al Sporting de Ceuta, parecía que el equipo visitante tenía la victoria asegurada. Sin embargo, en los minutos finales, una disputa entre jugadores derivó en una pelea que involucró a futbolistas de ambos equipos.
Las imágenes captadas durante el altercado muestran cómo un jugador del Inter Ceuta se enfrenta al portero del Sporting, quien presuntamente propinó el primer golpe. A partir de ese momento, la situación se descontroló, con jugadores de ambos equipos involucrándose en el conflicto. El cuerpo técnico de ambas escuadras intentó intervenir para calmar los ánimos, pero la intensidad de la pelea llevó al árbitro a suspender el partido de manera inmediata.
Sanciones y consecuencias médicas
El colegiado tomó medidas disciplinarias en el momento, mostrando tarjetas amarillas y rojas a varios jugadores involucrados. Tras el incidente, varios integrantes del Inter Ceuta tuvieron que ser trasladados al Hospital Universitario para recibir atención médica por los golpes sufridos durante la trifulca.
Un golpe a los valores del deporte
Este nuevo incidente supone un duro revés para el fútbol base caballa, que una vez más se ve ensombrecido por comportamientos inadmisibles dentro del terreno de juego. La violencia y las agresiones físicas contrastan con los valores fundamentales que el deporte debe transmitir, como el respeto, el compañerismo y el juego limpio.
El partido suspendido deja una mancha en la Regional Preferente y plantea la necesidad de reforzar las medidas disciplinarias y educativas para evitar que se repitan este tipo de incidentes que perjudican tanto al fútbol como a su imagen en Ceuta.