Voces del Instituto Armado como la Asociación Española de Guaridas Civiles (AEGC), la organización Independientes de la Guardia Civil (IGC) la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) o la Asociación de Guardia Civil Jucil han celebrado el cese de Félix Azón y de la Secretaria de Estado de Seguridad, Ana Botella
Fuentes cercanas al ministro apuntaban desde hace días que el cese de Azón ha sido provocado por su gestión, «muy contestada desde el seno del propio Instituto armado tanto por las asociaciones de la Guardia Civil como por los mandos, que le recriminaban que la Policía Nacional hubiera ganado peso en Interior a su costa» señala la Cadena Ser.
Desde la Asociación Española de la Guardia Civil (AEGC) creen que la decisión del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, de cesar al director general de la Guardia Civil, Félix Azón, es «una buena noticia para los guardias civiles«.
Desde la AEGC señalan que «este juez, que llegó presumiendo de ser hijo del cuerpo, ha sido, paradójicamente, incapaz de conocer la realidad de la Guardia Civil y de los guardias civiles, entender sus necesidades y peor aún, defender su trabajo, su valía y sus intereses«. La organización de la Benemérita apunta que prueba de esta «incapacidad» han sido sus últimos movimientos «cuando intentó sacar una norma sobre jornada y horarios que hacia retroceder a los guardias civiles más de veinte años en derechos y solo evitó el desastre la oposición frontal de las Asociaciones Profesionales, a las que ha despreciado. Una norma que fue criticada públicamente hasta por un General de la Guardia Civil por considerarla lesiva e injusta con los guardias civiles refleja claramente su desconocimiento».
Por su parte, la organización de Independientes de la Guardia Civil (IGC), considera que «el cambio es bueno ante los desaciertos de ambos, que además unieron sus destinos expresándolo ante los representantes de las asociaciones profesionales para el caso que se prescindiera de alguno de ellos».
Félix Azón fue un Director General «pasivo«, apuntan desde la IGC, «que aprovechó el cargo para satisfacer las demandas involucionistas de los sectores más tradicionales de la Guardia Civil, teniendo desplantes autoritarios en algunos momentos ante los representantes de las asociaciones profesionales, e incluso apartando a su mano derecha, Julia Pérez Rodríguez Urrutia, de corte progresista que tomó parte por las asociaciones profesionales. Persona plenamente capacitada para el cargo de Directora General«.
Desde IGC han aprovechado para recriminar que «Grande-Marlaska tampoco ha estado acertado respecto a las organizaciones profesionales de la Guardia Civil, cuando dijo que hay derechos que se pueden dejar aplicar, refiriéndose a los derechos fundamentales, siendo corregido por el presidente Independientes de la Guardia Civil IGC, en el sentido de que si bien ningún derecho es ilimitado, se debe respetar su contenido esencial».
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha sido tajante en su twitter, apuntan que “#AzónDimisión ha demostrado no ser consciente de los graves retrocesos que bajo su nefasta gestión están sufriendo los guardias civiles” y señalan que «Tras la destitución de Félix Azón, el nombramiento de un nuevo responsable al frente de la DGGC es el primer paso para normalizar las relaciones con las asociaciones, pero no es suficiente».
Por su parte, la Asociación de Guardia Civil Jucil también ha celebrado el cese en su red social, donde han recordado que llevan desde febrero de 2019 «exigiendo su dimisión, hoy confirmamos la destitución de Azón como Director General de la @guardiacivil. Necesitamos un director general que defienda los intereses de todos los #GuardiasCiviles”.
Sobre Ana Botella
Sobre la ex Secretaria de Estado de Seguridad, Ana Botella, también se han pronunciado las organizaciones de guardias civiles. La AEGC aplaude el cese «porque la gestión sobre el proceso de equiparación salarial y el resultado de los estudios técnicos y análisis sobre equiparación salarial efectuados por la consultora Ernst&Young fue patética llegando a reconocer esta que había tenido que realizar el estudio sin tener todos los datos necesarios para llevarlo a cabo con rigor».
Por su parte, desde IGC señalan en relación al mismo asunto de la equiparación salarial que «la Secretaria de Estado estuvo desacertada también cuando presupuso que, dijera lo que dijera el informe sobre equiparación salarial, no había lugar a más subida salarial para policías y guardias civiles, ante otras demandas de otros funcionarios, como ella también lo era».
Retos para el nuevo equipo
Desde la AEGC esperan que el nuevo equipo del Ministerio del Interior «esté más comprometido con las mujeres y los hombres que formamos parte de esta gran familia, que respete y valore nuestro trabajo y abra una puerta al diálogo con las Asociaciones Profesionales para que podamos aportar nuestras ideas. Conocemos nuestras necesidades y, por tanto, sabemos como mejorar las condiciones de vida de los guardias civiles y mejorar el servicio que la Guardia Civil da a los ciudadanos» explican.
«Tienen por delante un arduo trabajo» advierten desde la AEGC. «El nuevo equipo debe hacer frente ya a la tercera fase de la equiparación, afrontar un nuevo despliegue territorial, porque la falta de personal no se soluciona hurtando derechos a los guardias civiles, luchar porque los guardias civiles no sean expulsados de Navarra, mejorar la formación y dotar de más medios materiales«.
«Esto para empezar, es decir, al nuevo equipo le queda mucho trabajo por hacer, esperamos que traigan mucha ilusión para afrontar el reto y la mente muy abierta» apuntan desde la Asociación Española de Guardias Civiles.
Por su parte, IGC asegura que «no guardamos ningún rencor a los ex dirigentes del Departamento de Interior y les deseamos felicidad en sus vidas, en el desempeño de las funciones que les correspondan próximamente».
En este sentido, AUGC confía en que «tras estas decisiones se inicie una nueva etapa en la que se alcance la plena homologación salarial y profesional de los guardias civiles con el resto de policías que operan en España». Para esta organización, «los primeros retos del nuevo equipo pasan por cumplir íntegramente el acuerdo de equiparación salarial, alcanzar una jornada laboral digna y un nuevo reparto de la productividad».
Para la AUGC a la espera de conocer el nombre de la persona que ocupe el cargo, «es importante recordar que ésta deberá llegar acompañada de una reestructuración en el gabinete del Director General que conlleve la creación de un equipo que ayude en la toma de decisiones».