El líder de Ceuta Avanza pide perdón y aclara que “si en algún momento se han sentidos señalados o aludidos, está muy lejos de la realidad”. Guerrero insiste en que todo esto forma parte de “una persecución a la que llevo tiempo sometido y que necesito zanjar de manera legal”
Javier Guerrero, presidente de Ceuta Avanza, está inmerso en la polémica tras las repetidas publicaciones de un medio de comunicación local sobre su supuesta prohibición de atender a menores tutelados en los centros de la Ciudad Autónoma y ser “expedientado” por el Ingesa indicándole que no realizara regalos a los menores.
El viernes pasado compareció públicamente anunciando que se había presentado denuncia por “extorsiones” a los menores para que declararan en su contra, indicando que fue él quien rompió relaciones con el Área de Menores porque “no le gustaba lo que estaba viendo”.
Sus declaraciones han tenido reacciones entre los trabajadores, por lo que Guerrero ha querido “clarificar” lo publicado y pedir disculpas a los trabajadores: “Mis más sinceras disculpas a todos los empleados del Área de Menores de la Ciudad Autónoma en general y a los del Centro la Esperanza en particular si en algún momento se han sentidos señalados o aludidos por mis declaraciones del pasado viernes porque está muy lejos de la realidad”.
Así, el ex consejero de Sanidad asegura que en sus declaraciones “no he concretado sobre ningún trabajador precisamente para salvaguardar y proteger la identidad de los que estaban declarando sobre los responsables, una manzana podrida no es referencia ni refleja el excelente trabajo que en Ceuta se desarrolla en el Área de Menores y del que he formado parte, sintiéndome orgulloso en todo momento de haber estado con ellos”.
Además, ha querido señalar “el altísimo grado de profesionalidad, humanidad e integridad inigualables” de estos trabajadores, ya que “gracias a ellos lleva gestionándose de forma impecable una de las áreas más complejas de la Ciudad Autónoma y posiblemente de España”.
“En la rueda de prensa del vienes únicamente estaba poniendo en conocimiento de los medios que algunos trabajadores del área de Menores estaban denunciando a dos superiores por intentar que algunos menores fueran extorsionados con llevarlos a la península a cambio de denunciar mentiras sobre mi persona. En ningún caso, pese que algún medio quiera deslizar dudas sobre mis palabras, he atacado a los trabajadores del Área de Menores”, continúa en su escrito.
Guerrero insiste en que todo esto forma parte de “una persecución a la que llevo tiempo sometido y que necesito zanjar de manera legal porque no me han dado otra opción. Si alguien ha malinterpretado mis palabras no era mi intención aludir a los trabajadores del Área de Menores, sino a los responsables que están actuando de una manera, como mínimo, poco ética”.
“Tengo el absoluto convencimiento y conocimiento de que todos estamos trabajando y dando lo mejor de nosotros mismos humanamente, con unos menores que son víctimas de una compleja situación que les viene dada”, sentencia su comunicado.