El portavoz del Gobierno de Ceuta, Carlos Rontomé, tacha a la oposición de infantil y teatrera, por supuesto directa o indirectamente de falta de nivel y literalmente comenta que «Los ceutíes no se merecen esta oposición«. La réplica inmediata a esta afirmación es una pregunta retórica: ¿Los ceutíes se merecen este Gobierno?
Para contestar a la pregunta basta lo escenificado en el pleno, no pleno casi pleno completamente pleno de incapacidad y vulgaridad, y por supuesto que un miembro de Vox lo presidió. ¿Los ceutíes se merecen este Gobierno? La respuesta es evidente para cualquier demócrata. Un contundente ¡NO!
Para analizar la afirmación del señor portaVox del Gobierno, Carlos Rontomé, debemos realizar un somero análisis de lo que supusieron y del contexto en que se realizaron las elecciones que dieron origen a lo que tenemos en la Asamblea. Para muchas fueron las elecciones del miedo, en las que se presionó al electorado con el supuesto voto útil para parar a la ultraderecha. ¿Y qué se ha conseguido? que la ultraderecha presida el último pleno. Que la ultraderecha campe a sus anchas por esta ciudad con una convivencia cada día más menguada. Que la ultraderecha gobierne. No sólo que gobierne, sino que lo haga con pistolas taser en el cinto, con un ejemplar de “Mi lucha” (“Mein Kampf”) del tito Adolf en la mesita de noche, una buena película como referencia “Raza” y, por supuesto, como banda sonora la fanfarria que anunciaba el comienzo de la proyección del “No-Do”. Y, por otro lado, que el principal partido de la oposición, con su famoso voto útil, demuestre un día sí y otro también la inutilidad de dicho voto pues de lo único que son capaces es de ausentarse de un pleno cuando se deben a toda la ciudadanía ceutí.
Escuchando la improvisada rueda de prensa del líder de la oposición queda muy claro porque un portavoz del Gobierno del PPVox se atreve a decir las cosas que dice sin reflexionar y con cierta, o toda, bravuconería y una gran dosis de maniqueísmo y machismo.
No tengo nada en su contra señor Rontomé, pero es que le escucho y … me cuesta trabajo creer lo que escucho. Vamos por partes … según usted una diputada de la asamblea es la que solivianta al resto de grupos políticos para que no entren en el pleno. Una visión muy a lo Sansón y Dalila ¿no le parece señor Rontomé? Y los señores Hernández y Alí se dejan seducir por los cantos de sirena de esta diputada y sin capacidad de decisión propia la siguen ciegamente. Debería meditar sus palabras y más en directo.
Pero continuamos, nos dice usted que la actitud de la diputada es motivada entre otras cosas por ser una “oposición nula” y que representa “un acto teatral”. Sin embargo, ustedes no son un Gobierno nulo y usted no dramatiza ni teatraliza cuando describe la situación del Consejero de Sanidad, señor Guerrero. Describe que se tuvo que quitar la bata, que está en un quirófano, que es grave la situación de tener que ausentarse del quirófano, que era un familiar del señor Guerrero el o la afectada (a la que le deseo una pronta recuperación y que la intervención haya sido un éxito). Llegados a este punto nos aproximamos a otras de las partes de su intervención. Dado mi desconocimiento en protocolos médicos, ¿me podría responder a las siguientes preguntas, por favor?: ¿El señor Guerrero estaba legítimamente ausente del pleno? ¿el señor Guerrero estaba o no estaba dentro de un quirófano mientras operaban a un paciente? ¿en calidad de facultativo, de familiar, de…? ¿el Consejero de Sanidad le ha autorizado para hacer públicos datos suyos tan personales? ¿realmente era necesario dar tantos detalles sobre los actos y situación personal del Consejero de Sanidad para salir del paso de la rebelión encabezada por la señora Hamed? Rebelión que ha narrado usted casi, casi, como si se tratara de la que llevó a cabo la reina Boudica contra el Imperio romano.
Seguimos con las partes, le recuerdo que dije que íbamos por partes. El portavoz del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Ceuta siente una gran predilección por denominar como antidemocrático todo aquello que no le gusta, exhibiendo precisamente él mismo una actitud antidemocrática. Los partidos de la oposición están en su derecho de no asistir al pleno, al igual que deben ser consecuentes y asumir las consecuencias reglamentarias legales derivadas de esta acción. Mas ahí no existe ningún acto antidemocrático y lo llamativo del caso es que las palabras del máximo responsable de Vox Ceuta son idénticas a las de señor Rontomé. ¿Es cuestionable la decisión tomada por la oposición ceutí? ¡Por supuesto! ¿es antidemocrática? ¡No! Lo antidemocrático podría ser no acatar las consecuencias normativas derivadas de estos hechos. Aprovecho para recordar al portaVox del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Ceuta que a principios de junio el PP abandonó el pleno del Senado al sentirse ofendidos por unas palabras de un representante de Más Madrid. ¿Fue eso antidemocrático?
Para concluir, una imagen vale más que mil palabras y ésta es la del representante de Vox presidiendo el pleno de la Asamblea de la Ciudad Autónoma de Ceuta junto con la cara de circunstancias del señor Vivas al tener que dejar la Conferencia de Presidentes para ceder al vicepresidente de Vox presidir el pleno.
¿Presagio?
Me temo que si el voto útil sigue yendo hasta donde hasta ahora así será.
Leonardo Da Vinci: “como el hierro, por falta de ejercicio, se cubre de herrumbre, y el agua se corrompe o se hiela por la misma causa, así el ingenio, sin ejercicio, se deteriora”.