El presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, Juan José Imbroda, ha calificado como “un disparate colosal” la decisión anunciada por la Delegación del Gobierno sobre el tránsito comercial en la frontera con Marruecos. Según Imbroda, esta medida supone “ceder soberanía económica y política a Marruecos”, lo que ha generado su total rechazo.
Imbroda ha acusado al Gobierno central de adoptar una decisión “desastrosa” sin consultar previamente con el Ejecutivo local, elegido democráticamente por los melillenses. “Es inaceptable que no se haya hablado con los representantes legítimos de Melilla”, afirmó el líder del Partido Popular. Además, aseguró que esta medida “no beneficiará en nada a la ciudad” y ha anunciado que recurrirán a todas las instancias posibles, incluyendo el Parlamento, la Fiscalía y los tribunales, para frenar su implementación.
Impacto en el comercio local
El presidente melillense ha destacado que esta medida perjudica gravemente al comercio local, ya que Marruecos decidirá qué productos pueden cruzar la frontera. “El comercio de Melilla no podrá vender nada a Marruecos porque no fabricamos nada, mientras que ellos sí podrán exportar sus productos a nuestra ciudad”, declaró.
Imbroda también ha señalado que esta política de tránsito comercial supone una pérdida de soberanía para Melilla. “Nos convertiremos en una región más de Marruecos, dejando que sea Rabat quien decida qué se vende y qué se compra”, advirtió.
Rechazo rotundo
El líder popular ha asegurado que su partido se opondrá de manera contundente a esta decisión. “El Gobierno central no puede adoptar una medida peor… o sí”, añadió en tono crítico, subrayando la falta de estrategia y visión en las decisiones del Ejecutivo nacional.
El presidente local ha reiterado su compromiso de defender los intereses de los melillenses y evitar que esta medida perjudique la economía y autonomía de la ciudad. “No permitiremos que se imponga esta cesión de soberanía que pone en peligro el futuro de Melilla”, concluyó.