Las fuertes lluvias en la provincia de Girona han causado una riada en Cadaqués, arrastrando 32 vehículos estacionados en la riera del municipio. La alcaldesa Pia Serinyana informó que el momento más crítico fue entre las 2 y 3 de la madrugada, aunque la riera sigue llevando agua, ya no con la misma intensidad.
Actualmente, se mantiene activada la prealerta en la zona debido a la previsión de lluvias que podrían acumular hasta 100 litros por metro cuadrado en 24 horas. Protección Civil ha emitido avisos para el Alt y Baix Empordà, instando a la población a tomar precauciones.
Intervención de los Bomberos
Los Bomberos de la Generalitat de Cataluña informaron que la riada ocurrió a las 03:54 horas. Los vehículos arrastrados quedaron amontonados bajo un puente, sin llegar al mar. Dos dotaciones de bomberos acudieron al lugar, siendo esta la única intervención en el Alt Empordà por las tormentas de la noche.
En el Baix Empordà, los bomberos recibieron ocho llamadas desde las 03:00 horas, principalmente por inundaciones en viviendas, aunque sin reportar heridos. La situación sigue siendo monitoreada de cerca por las autoridades.
Advertencias Ignoradas
La alcaldesa Serinyana destacó que el ayuntamiento había prohibido aparcar en la riera debido a las alertas del Cecat (Centro de Coordinación Operativa de Catalunya). Sin embargo, muchos residentes ignoraron las advertencias, resultando en el arrastre de sus vehículos.
Serinyana explicó que, aunque en Cadaqués no llovió intensamente, las precipitaciones se concentraron en el Pení, la montaña adyacente, que canalizó el agua hacia la riera. Este fenómeno natural subraya la importancia de seguir las recomendaciones de las autoridades en situaciones de emergencia.
Medidas de Precaución
Ante la posibilidad de más lluvias, Protección Civil mantiene la prealerta del plan Inuncat. Se recomienda a los ciudadanos evitar zonas inundables y estar atentos a las actualizaciones meteorológicas. Las autoridades locales continúan trabajando para garantizar la seguridad de los habitantes y minimizar los daños materiales.
Este evento destaca la necesidad de una mayor concienciación sobre los riesgos asociados a las condiciones climáticas extremas y la importancia de seguir las directrices de seguridad emitidas por los organismos competentes.