Menos de dos días han pasado desde que una violenta DANA arrasó Paiporta, dejando a sus habitantes incrédulos ante la magnitud del desastre. Las calles, situadas a escasos kilómetros de Valencia, están cubiertas por una capa de lodo que dificulta el paso, mientras que los coches se amontonan como si de un desguace se tratara.
Esta localidad ha sido el epicentro de la tragedia, sufriendo las peores consecuencias de una gota fría que ha sorprendido incluso a los más ancianos. Con más de 100 fallecidos contabilizados en la provincia, al menos 45 son de Paiporta. La mayoría de los hogares carecen de agua corriente, electricidad y gas, y los vecinos buscan desesperadamente lo esencial: agua y alimentos.
Esfuerzos de Rescate y Ayuda
A pesar de los esfuerzos incansables de Protección Civil, UME, Guardia Civil, Policía Nacional, Policía Local y Bomberos, la magnitud de la tragedia supera los recursos disponibles. Tamara, una guardia civil, describe la situación como una catástrofe inesperada, trabajando largas horas para auxiliar a los afectados.
Seis personas fallecieron en el centro de mayores Savia, donde el agua inundó la planta baja. Los residentes restantes fueron evacuados, dejando el edificio vacío.
Problemas de Seguridad y Abastecimiento
Las patrullas nocturnas intentan evitar saqueos, un problema común en estas situaciones. Comercios y vehículos han sido blanco fácil para los ladrones. Ana, una vecina, admite haber tomado productos de primera necesidad de un supermercado, justificando la acción por la falta de ayuda oficial.
La falta de agua potable es uno de los problemas más urgentes. Bomberos de Alicante han distribuido agua desde camiones cisterna, pero la desorganización ha dificultado que todos los vecinos accedan a esta ayuda.
Desplazamiento y Solidaridad
Con el transporte público fuera de servicio y las calles intransitables, los vecinos dependen de amigos y familiares de pueblos cercanos para recibir suministros. Algunos, como Dunia y Daniel, han decidido abandonar temporalmente el pueblo hasta que la situación mejore.
La comunidad de Paiporta enfrenta un desafío monumental para recuperar la normalidad. La solidaridad entre vecinos y la ayuda externa serán cruciales en los próximos días para superar esta crisis.