El consejero del Gobierno de Ceuta, Jacob Hachuel asistió como presidente accidental de la Ciudad esta tarde en la puerta de la Sinagoga al encendido inaugural del alumbrado ornamental de la Janucá y al acto organizado por la Comunidad Israelita a continuación en la Plaza Nelson Mandela.
Allí el representante de la Comunidad Hebrea, Alberto Aflalo, recordó el origen de esta festividad. La Janucá, comenzó ayer 2 de diciembre. Conocida también como Fiesta de las Luces es celebrada durante ocho días y en ella se conmemora la derrota de los helenos y la recuperación de la independencia judía a manos de los macabeos sobre los griegos seléucidas. Acto seguido sobrevino la posterior purificación del Segundo Templo de Jerusalén que había sido ocupado, se desalojó y limpió de iconos paganos en el siglo II a. C. Así rememora la comunidad judía la superación de estos estragos, un momento crucial de su historia particular. La tradición judía habla de un milagro que sucedió en este periodo convulso. Se encendió un candelabro en el Templo y la llama aguantó encendida durante ocho días consecutivos con una mínima cantidad de aceite que apenas alcanzaba para uno dando pie al asombro de la comunidad y a reponer las existencias. Este hecho se consideró un milagro y dio origen a la costumbre central de la festividad, consistente en encender un candelabro de nueve brazos d días, incluyendo «el piloto».
Como recalcó Aflalo, la Janucá supuso «una lucha para mantener sus costumbres y tradiciones que enseña a no ceder y mantener la identidad». Aflalo rindió homenaje a la «tolerancia ejemplar y la existencia de diversas religiones de Ceuta cada una con sus señas de identidad» y agradeció a «todos aquellos que hacen posible la celebración de esta festividad cada 25 de Kislev como marca la tradición».
Las bailarinas del ballet de Rosa Founaud amenizaron la velada. Procedieron al encendido de las velas de la Januquía, representantes de las Comunidades religiosas de nuestra ciudad. Comenzando por la Comunidad Musulmana, Abdelkader Mohamed; Cristiana, Encarnación Mercado; Hindú, Ramesh Chandiramani; Evangelista, Javier Santolaria; Hebrea, Moisés Wahnon y Jacob Levy; seguidos del comandante general, Javier Santos Sifre, la delegada del Gobierno, Salvadora Mateos y el Presidente accidental, Jacob Hachuel.
El ambiente era animado y festivo con presencia de cantidad de niños, con sus padres a los que Aflalo dirigió un mensaje «por mantener esa llama de esperanza siempre viva y encendida». El representante de la Comunidad Hebrea se despidió con un cordial «Shalom» e invitó a los asistentes en la plaza a degustar buñuelos con chocolate caliente.