Ingesa presentó en la Mesa Sectorial de Madrid celebrada ayer miércoles, a la consideración de las organizaciones sindicales la previsión de convocar próximamente mediante procesos selectivos, 232 plazas de disferentes cuerpos para Ceuta y Melilla. Ingesa anuncia que la salida a oposición de estas plazas suponen el inicio del proceso de reducción de la temporalidad de los profesionales de la salud en nuestra Ciudad. La convocatoria de la oferta de estabilización está prevista para el último trimestre de 2019.
Por tanto, este proceso de reducción de la temporalidad se llevara a cabo mediante la cobertura de las plazas aprobadas en la Oferta Pública de Empleo de 2016, que ahora se inicia, y en las plazas de la oferta de empleo público de estabilización del empleo temporal aprobadas en los Presupuestos Generales del Estado de 2017 y en la las ofertas ordinarias de los años 2017 y 2018.
El Instituto Nacional de Gestión Sanitaria anuncia que se presenta un horizonte de oportunidad para los profesionales de la salud que actualmente mantengan una vinculación temporal en el ámbito del Ingesa, toda vez que el total de las plazas que se ofertarán en el marco de estos procesos selectivos, superará las 600.
La versión de SATSE
La versión del Sindicato de Enfermería difiere de la Ingesa en el punto de considerar que Ingesa «ha dado marcha atrás en el compromiso adquirido de reubicación del personal eventual desplazado de los puestos que desempeñaban al culminar el concurso de traslados en el territorio de su competencia».
El director general de Ingesa, Alfonso Jiménez, ha anunciado en la Mesa que los trabajadores cesados «no van a ser reubicados». Una decisión adquirida de forma unilateral y justificada en función de «motivos presupuestarios». Para SATSE este cambio de parecer «condena a los desplazados al paro y a la bolsa de contratación», es decir «a la inestabilidad laboral», en vez de «cubrir otras plazas que están vacantes en las plantillas».
A pesar de que SATSE ha recordado al Ingesa que «ese compromiso consta por escrito y rubricado en un acta que dice que se iba a reubicar al personal desplazado siempre y cuando hubiera plazas vacantes presupuestadas».
En Ceuta, solo de Enfermería, se han visto afectadas ocho enfermeras y tres matronas, aunque hay trabajadores de otras categorías que están en esta misma situación. El sindicato entiende que los afectados demandarán movilizaciones de protesta ya que el director se mostró inflexible en la negociación, a pesar del detrimento «en la asistencia sanitaria que implica la decisión». Según informa el sindicato, Ingesa no les ha facilitado la distribución del número de plazas para Ceuta. Aun así la ciudad continúa a la cola de España con una ratio de 3,3 enfermeros por 1000 habitantes, inferior al resto del país. Esta ratio contempla la población flotante que se refiere a transeúntes eventuales que precisan asistencia, como puedan ser turistas, personal del Instituto Social de la Marina o inmigrantes transfronterizos. España ocupa el 24 lugar de 28 países de la Unión Europea.
Desde SATSE señalan que en la reunión que mantuvieron el pasado 22 de enero el Ingesa se propuso ofertar 170 plazas, a pesar de contravenir las 240 anunciadas por el BOE en marzo de 2016. Por fortuna en la Mesa Sectorial estas plazas aumentaban hasta las 232, aunque STSE continúa reclamando cuatro plazas.