Íñigo Errejón, quien hasta hace poco era el portavoz de Sumar en el Congreso, ha anunciado su retirada de la política. La noticia llega en medio de acusaciones de comportamientos machistas que han sacudido al partido y a la opinión pública.
Errejón ha explicado que su decisión se debe al «desgaste físico y emocional» acumulado durante sus diez años en la política activa. En una carta publicada en su cuenta de X, afirmó: «He llegado al límite entre el personaje y la persona».
La controversia comenzó cuando la periodista Cristina Fallarás compartió en Instagram un mensaje anónimo que describía a un político madrileño como un «monstruo» y «maltratador psicológico». Aunque el mensaje no mencionaba nombres, muchos usuarios lo asociaron con Errejón, lo que llevó a una serie de relatos similares en redes sociales.
Ante esta situación, Más Madrid se reunió para discutir las acusaciones. Errejón confirmó la información, lo que llevó al partido a exigirle su dimisión y la entrega de su acta de diputado. Manuela Bergerot, portavoz de Más Madrid, declaró en X: «Leímos las acusaciones y preguntamos al aludido. Tras su respuesta, exigimos su dimisión».
En respuesta a las acusaciones, Sumar emitió un comunicado asegurando que investigará las informaciones aparecidas en redes sociales sobre Errejón. Yolanda Díaz, líder del partido, reafirmó el compromiso «firme» y «sin excepciones» de Sumar contra el machismo.
La actriz Elisa Mouliaá también se pronunció en X, afirmando haber sido víctima de «acoso sexual» por parte de Errejón y expresó su intención de denunciarlo. Este testimonio ha añadido más presión sobre el político.
En su carta de despedida, Errejón expresó su deseo de «contribuir a reparar» los errores cometidos y admitió una «subjetividad tóxica» que, según él, «el patriarcado multiplica». Aseguró que su decisión fue madurada durante meses y que prioriza su salud mental sobre su carrera política.
Errejón ha sido un defensor de la salud mental en el ámbito político y ha decidido abandonar la política institucional para centrarse en su bienestar personal. «Llevo tiempo trabajando en un proceso personal y de acompañamiento psicológico», explicó.
A pesar de su salida, Errejón ha manifestado su intención de seguir militando y comprometido con la ideología progresista, esperando contribuir a un «relevo generacional de cuadros e ideas» dentro de las fuerzas populares.
Por su parte, Sumar ha aceptado su dimisión y ha reiterado su compromiso con la construcción de una sociedad y política feminista. La ejecutiva del partido se reunió de inmediato para abordar la situación y aceptó unánimemente la renuncia de Errejón.
Con la salida de Errejón, el grupo plurinacional de Sumar deberá elegir un nuevo portavoz. Se espera que Alda Recas, miembro de Más Madrid, ocupe su vacante en el Congreso.