En medio de la devastación provocada por la DANA en la Comunidad Valenciana, miles de ciudadanos intentan acudir a las zonas afectadas para ofrecer su ayuda. Al mismo tiempo, el reciente anuncio de 35 millones de euros en fondos para atención a inmigrantes ha generado preguntas sobre la disponibilidad de recursos para atender las necesidades urgentes en Valencia.
La Comunidad Valenciana se enfrenta a la difícil tarea de recuperación tras la última DANA, que ha dejado un panorama de devastación en numerosos municipios. En respuesta a la emergencia, miles de ciudadanos se han dirigido a las zonas más afectadas para prestar su apoyo en las labores de rescate y limpieza. Sin embargo, el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, han instado a la población a no desplazarse hacia las áreas afectadas para evitar saturar las vías de acceso y facilitar el trabajo de los servicios de emergencia. Mazón explicó que podría ser necesario tomar “medidas adicionales” para evitar que se congestionen los accesos, señalando la apertura de un centro de recepción de voluntarios en Valencia, donde se canalizará la ayuda de manera organizada.
En medio de esta situación, el reciente anuncio de una partida de 35 millones de euros aprobada por el Consejo de Ministros para la atención de inmigrantes ha generado preguntas sobre la priorización de recursos. La partida incluye fondos para programas de asesoramiento, escolarización e integración de menores no acompañados, además de cubrir gastos operativos en centros de acogida. Este presupuesto ha sido percibido por algunos sectores como una decisión que podría competir con las necesidades urgentes de recursos en las zonas afectadas por la DANA. Mazón expresó que la Comunidad Valenciana “necesita todos los recursos disponibles” para hacer frente a la situación y prestar apoyo a las personas afectadas por las inundaciones.
Después de la reunión del Centro de Coordinación de Emergencias (Cecopi), Fernando Grande-Marlaska reforzó la necesidad de mantener la movilidad restringida en Valencia para que los servicios públicos puedan operar sin dificultades. El ministro informó que la Unidad Militar de Emergencias (UME) y la Guardia Civil han logrado llegar a algunas de las zonas más complicadas y ya han rescatado a más de 4.500 personas. Según explicó, mantener despejadas las vías es esencial para que los equipos de emergencia puedan realizar sus labores de manera efectiva, dado el alto nivel de daños y la dificultad de acceso en algunas áreas.
Desde el Centro de Coordinación de Emergencias, también se ha pedido a la ciudadanía evitar el uso de vehículos privados en las zonas afectadas, instando a los residentes a permanecer en sus hogares siempre que sea posible. La intención de las autoridades es reducir al mínimo la interferencia en las tareas de rescate y garantizar la seguridad tanto de los voluntarios como de los afectados por la DANA. En redes sociales, el Cecopi ha subrayado que, aunque agradecen la solidaridad ciudadana, la colaboración debe ser ordenada para maximizar la eficiencia de los servicios de emergencia.
En cuanto a la situación de los desaparecidos, Mazón explicó que los números están en constante cambio debido a la complejidad de la situación y a la necesidad de verificar los datos. Ha recordado a las familias que deben contactar al número de emergencias habilitado si tienen información sobre sus seres queridos. Un equipo de técnicos continúa actualizando la información sobre personas desaparecidas, a medida que los equipos de rescate avanzan en la recuperación de las zonas más afectadas.
Las autoridades autonómicas y nacionales seguirán evaluando las necesidades de los damnificados y las acciones necesarias para coordinar tanto la intervención de los servicios públicos como la ayuda ciudadana en Valencia. El objetivo en esta etapa es avanzar lo más rápido posible en la recuperación de las áreas afectadas y continuar brindando el apoyo necesario a la población en este complejo proceso de reconstrucción.
