TRAGSA continúa retirando las concertinas de la valla que separa Ceuta de Marruecos. Según ha podido saber El Foro de Ceuta, el Ministerio del Interior ha decido colocar una sofisticada valla con cuatro tramos: un cuarto inferior de la valla que permita la visión al otro lado, un cuerpo intermedio de chapa, un tercer cuerpo de malla anti-trepa y coronando la valla unos tubos huecos de acero que formarán un arco de medio metro
El pasado mes de diciembre, un año después del anuncio del Gobierno de la retirada de las concertinas en las vallas de Ceuta y Melilla, comenzaron las obras de retirada de «los elementos lesivos» y de colocación de un nuevo sistema. La empresa adjudicataria fue Tragsa y el ministerio de Grande-Marlaska destinaba al proyecto de las concertinas un presupuesto de 18 millones de euros. El paquete total, de 32 millones, incluía otros “sistemas de protección fronteriza” que afectan a los controles del Tarajal. Entre estas medidas de «modernización» de la Frontera se encuentran el circuito de control televisión o la instalación de la «frontera inteligente«.
Durante estos meses ha habido muchas especulaciones sobre qué elementos sustituirían a las concertinas para evitar la «entrada masiva» de migrantes. El propio Ministerio del Interior ha señalado en múltiples ocasiones que todavía no se había decidido el sistema que reemplazaría a las cuchillas que colocó Zapatero.
La realidad es que éstas no comenzaron a retirarse hasta que Marruecos finalizó su muro anti-inmigrantes con triple concertina y la colaboración europea a través de la cesión de fondos para el control de los flujos migratorios. Una medida ampliamente criticada por los colectivos que defienden los derechos humanos.
El pasado mes de noviembre, Interior anunció que la empresa pública Ingeniería de Sistemas para la Defensa de España (ISDEFE) hacía meses que había propuesto tres opciones diferentes para sustituir las concertinas y que el Ministerio, después de varias reuniones con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, había optado por una especie de tornos no fijados que impiden el agarre a la parte superior.
Una nueva valla más sofisticada
Según ha podido saber El Foro de Ceuta, a través fuentes que trabajan sobre el terreno, finalmente el ministerio de Grande-Marlaska ha optado por la colocación de una valla muy sofisticada con tres tramos diferentes y coronada por unos tubos huecos de acero que van a formar un medio arco de desarrollo 150º de radio. Se trata de una valla «menos cruenta pero más efectiva», explican las mismas fuentes.
Tras la cimentación, se va a colocar una valla que contará con un primer tramo «normal», es decir, se mantendría una «malla nueva, más moderna y reforzada» que permitirá a la Guardia Civil ver a través de ella y controlar lo que pasa al otro lado. Encima de esta malla continuaría un cuerpo intermedio de chapa, unas planchas metálicas que dificultarían la escalada de las personas migrantes.
Un tercer tramo superior estará compuesto por una malla anti-trepa, que consiste una malla metálica electrosoldada anti-escalada utilizada normalmente «en sistemas de cerramiento diseñados para tener la máxima protección perimetral en un sitio sin obstaculizar la visibilidad. Se trata de un cerramiento recomendado para instalaciones militares, instituciones penitenciarias, almacenes, edificios gubernamentales, plantas nucleares o térmicas y zonas industriales.
Coronando esta valla, en lugar de cuchillas habrá 55 centímetros de tubos de acero huecos haciendo un medio arco de desarrollo 150º de radio, y distancia entre tubos de 15 centímetros y un vuelo total de 1,1 metros «como una especie de peine de púas doblado hacia atrás».