La inversión en pisos se ha convertido en un tema recurrente en plataformas como YouTube, donde abundan los videos que prometen enseñar a invertir con poco dinero. Sin embargo, mientras estos consejos proliferan, el precio del metro cuadrado en ciudades como Barcelona, Madrid y Valencia ha aumentado considerablemente en los últimos años.
Según datos de Idealista, el alquiler en Barcelona ha subido un 46% en cinco años, mientras que en Madrid el incremento es del 29% y en Valencia casi del 67%. Estos aumentos han llevado a manifestaciones en ciudades como Madrid, donde la plataforma Hábitat24 reclama el derecho a una vivienda digna.
La economista Judit Montoriol de CaixaBank Research sugiere que el problema radica en la falta de oferta frente a una demanda creciente. Sin embargo, Jaime Palomera del Institut de Recerca Urbana de Barcelona argumenta que la especulación es el verdadero motor detrás de los precios elevados, señalando que la vivienda se trata como un activo financiero más que como una necesidad básica.
En cuanto a la compra de viviendas por empresas, el Instituto Nacional de Estadística indica que las sociedades representan alrededor del 10% de las transacciones, una cifra que no ha cambiado significativamente en los últimos años. A pesar de esto, Palomera advierte que incluso este pequeño porcentaje puede influir en el mercado al buscar altas rentabilidades.
Otro factor relevante es el aumento de compras sin hipotecas y por extranjeros no residentes. Según el INE, desde 2014, el 56% de las compras se realizan sin hipoteca, lo que sugiere que muchos compradores ven la vivienda como una inversión rentable. Además, las compras por extranjeros han aumentado, especialmente en zonas turísticas, contribuyendo a la presión sobre los precios.
La rentabilidad de la vivienda también ha subido, alcanzando un 11,4% en el tercer trimestre de 2024. Aunque la rentabilidad bruta por alquiler se mantiene en un 3,3%, la apreciación del valor de las propiedades sigue atrayendo a inversores.
Las soluciones propuestas varían según el diagnóstico. Mientras Montoriol aboga por aumentar la oferta de vivienda, Palomera sugiere prohibir las compras especulativas y gravar más a quienes compran casas para inversión. El futuro del mercado dependerá de las políticas adoptadas y de cómo se equilibren estos intereses contrapuestos.