Con la abstención de Estados Unidos y Rusia, el máximo órgano encargado de velar por la seguridad internacional adopta una resolución que se convierte en la primera que aprueba desde que comenzó la actual crisis el 7 de octubre. El documento llama a todas las partes a que se abstengan de privar a la población civil de la Franja de Gaza de los servicios básicos y la asistencia humanitaria indispensables para su supervivencia.
El Consejo de Seguridad aprobó este miércoles, por 12 votos a favor y 3 abstenciones, una resolución sobre la situación en la Franja de Gaza en la que pide “pausas corredores humanitarios urgentes y ampliados” en toda la Franja de Gaza.
Esas pausas deben durar “un número suficiente de días” para permitir “el acceso humanitario pleno, rápido, seguro y sin trabas” las agencias humanitarias de las Naciones Unidas y sus asociados como el Comité Internacional de la Cruz Roja y otras organizaciones humanitarias.
Esas pausas humanitarias deben servir para facilitar el suministro continuo, suficiente y sin obstáculos de bienes y servicios esenciales importantes para el bienestar de la población civil, especialmente de los niños, en toda la Franja de Gaza, como electricidad, combustible, alimentos y agua potable, así como reparaciones de emergencia de infraestructuras esenciales.
Asimismo, deben servir para el rescate y la recuperación urgentes de los desaparecidos entre los escombros de los edificios dañados y destruidos, así como para la evacuación médica de los niños enfermos heridos y sus cuidadores.
El documento también exige “la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes retenidos por Hamás y otros grupos, especialmente los niños, y que se garantice el acceso inmediato de la ayuda humanitaria”.
El Consejo de Seguridad pide a todas las partes que se abstengan de privar a la población civil de la Franja de Gaza de los servicios básicos y la asistencia humanitaria indispensables para su supervivencia, en consonancia con el derecho internacional humanitario, lo que tiene un impacto desproporcionado en los niños.
Votación
Tanto Estados Unidos como Rusia, que en semanas anteriores habían vetado sendas resoluciones paralizando al Consejo de Seguridad, decidieron abstenerse en esta ocasión, lo que permitió la adopción de la resolución.
La falta de una condena a Hamás y la ausencia de un alto el fuego sostenible fueron las razones que Washington y Moscú esgrimieron, respectivamente, para no sumarse a la resolución. El Reino Unido también se abstuvo.
Francia, China, Malta, EAU, Albania, Brasil, Ecuador, Gabón, Ghana, Japón, Mozambique y Suiza votaron a favor.
La resolución, que fue presentada por Malta, exige que todas las partes cumplan las obligaciones que les impone el derecho internacional, incluido el derecho internacional humanitario, en particular en lo que respecta a la protección de los civiles, especialmente de los niños.
La resolución llega casi seis semanas después del 7 de octubre cuando un ataque de Hamás mató a 1200 israelíes y el cautiverio de 240 personas, lo que fue seguido por una respuesta de Israel que hasta ahora ha provocado la muerte de más de 11.000 vidas palestinas, en su mayoría mujeres y niños.
Previamente a esa fecha, 2023 ya era el año más violento desde 2005 con más de 250 palestinos y 30 israelíes muertos en un conflicto que se prolonga durante 56 años de ocupación.