Se ve que el presidente Juan Vivas ya no pasea la ciudad como la hacía hace años. Hace años raro era el día que no se le veía a Vivas pasear son sus acompañantes. Alguno de sus antiguos acompañantes de paseos por la ciudad hoy día ostenta el cargo de consejero en el ayuntamiento.
Digo que Juan Vivas ya no pasea como antes, porque dudo mucho que no hubiese puesto «el grito en el cielo» viendo día tras día como la obra que empezaron ya hace meses, en la acera que lleva al Cementerio de Santa Catalina, no avanza, es más, todo apunta a que está parada.
La obra que están acometiendo en esa zona (la de la foto) hace ya tiempo que la empezaron y nadie sabe nada de ella, lo que si sabe todo el mundo que pasa por ahí, es que cada dos por tres las vallas se caen con el viento y ocupan la acera entera. Lo que también saben las personas que andan y corren por esa zona es que no hay espacio para poder guardar la distancia de seguridad que hay que mantener entre personas para evitar el contagio de la covid-19.
Otra cosa que también sabe todo el que pasea y corre por esa zona es que se tiene que jugar el tipo tirándose a la carretera para poder mantener un mínimo de distancia de seguridad entre personas para el tema de la covid-19.
¿Qué hace esa obra parada? Eso que se lo pregunten a los técnicos y asesores del ayuntamiento que tanto saben de todo.