La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha publicado su previsión oficial para la Semana Santa de 2025, y las noticias no son alentadoras para quienes planeaban disfrutar de días soleados y temperaturas agradables. El pronóstico advierte de un tiempo inestable, con lluvias generalizadas, temperaturas más frías de lo habitual y un riesgo elevado de nevadas en zonas de montaña.
Este mes de marzo ha estado marcado por un clima inusual, con una alternancia entre días de calor inesperado y descensos térmicos pronunciados acompañados de lluvias intensas. Ahora, la AEMET advierte que esta inestabilidad continuará en abril, lo que podría convertir la Semana Santa en una de las más lluviosas de los últimos años.
Según el meteorólogo Roberto Brasero, España se enfrenta a un giro radical en su climatología, con un patrón de bajas presiones que persistirá sobre la península. Jorge Rey, el joven predictor del tiempo, también ha alertado sobre la llegada de lluvias históricas y nevadas intensas, pidiendo extremar la precaución ante posibles fenómenos adversos.
El tiempo en Semana Santa: ¿qué esperar?
De acuerdo con los modelos meteorológicos más recientes, la Semana Santa estará marcada por precipitaciones superiores a la media en gran parte del país, afectando especialmente el centro y el sur peninsular. Solo algunas zonas del Mediterráneo, Galicia y los archipiélagos podrían librarse de esta tendencia.
- Lluvias: Se esperan precipitaciones abundantes en la mayor parte de España, con especial incidencia en el centro, el sur y el noreste peninsular.
- Nevadas: Las temperaturas más frías propiciarán nevadas en zonas montañosas, lo que podría complicar el tráfico en carreteras de alta altitud.
- Temperaturas: Baleares y Canarias experimentarán temperaturas ligeramente superiores a la media, mientras que el interior peninsular, sobre todo en Castilla-La Mancha, Extremadura y Andalucía, podría registrar un ambiente más fresco de lo habitual.
Posibles impactos en los planes de Semana Santa
Las condiciones meteorológicas previstas podrían afectar las actividades al aire libre y, en particular, las tradicionales procesiones de Semana Santa en muchas ciudades españolas. En 2024, la Semana Santa ya fue una de las más lluviosas de las últimas décadas, y este año la tendencia parece repetirse, con el agravante de un posible aumento en la frecuencia de borrascas.
A pesar de que la previsión aún podría cambiar ligeramente, los expertos recomiendan seguir de cerca las actualizaciones meteorológicas y considerar planes alternativos ante el alto riesgo de inclemencias del tiempo.
