La Asociación de Consumidores Halal de Ceuta (Acohace) ha emitido un comunicado en el que alienta a las familias musulmanas a mantener el carácter tradicional y familiar de la festividad del Eid al-Adha. Esta celebración, conocida también como la Fiesta del Sacrificio, tiene raíces profundas tanto culturales como religiosas que se transmiten de generación en generación. Realizar el sacrificio en el hogar, según la asociación, no solo conserva estas costumbres, sino que también aporta un enriquecimiento emocional y espiritual a quienes participan en ella.
«El sacrificio en familia conecta a las personas con sus raíces y mantiene vivas las historias y valores transmitidos a lo largo del tiempo. Acohace advierte que trasladar estas prácticas a entornos más asépticos y alejados del núcleo familiar puede despojar de contenido estas costumbres.» La asociación ha querido recalcar que el acto de sacrificar en el hogar no solo posee un significado religioso, sino que también brinda la oportunidad de educar a los más jóvenes sobre la fe y los valores del Islam, recordando la acción de Abraham al estar dispuesto a sacrificar a su hijo siguiendo la orden de Dios.
Las autoridades han propuesto que el sacrificio se realice en mataderos móviles, argumentando razones sanitarias. Sin embargo, Acohace cuestiona la viabilidad de esta medida, destacando la imposibilidad de sacrificar las aproximadamente 7.000 cabezas de ganado durante el breve periodo de la festividad. Además, las largas esperas pueden generar tensiones y complicaciones innecesarias.
Desde el punto de vista de Acohace, la insistencia en utilizar mataderos móviles tiene un trasfondo económico y comercial que beneficia a la empresa concesionaria de estos servicios. La asociación considera que esta medida distorsiona el carácter sagrado del rito, transformando una celebración religiosa en una simple operación logística. También se denuncia una falta de comprensión y apoyo por parte de los responsables políticos, quienes han permitido esta privatización sin valorar adecuadamente la importancia cultural y religiosa de la festividad.
Acohace invita a las familias a defender su derecho a celebrar el Eid al-Adha en un entorno familiar, preservando así las tradiciones y la identidad religiosa. La asociación llama a la reflexión sobre la importancia de mantener estas costumbres vivas, no solo como un acto de fe, sino como un legado cultural que debe ser transmitido a las futuras generaciones.
Mantener las tradiciones familiares fortalece la identidad y la cohesión social. Preservar estas prácticas es fundamental para mantener el vínculo con las raíces y garantizar que las próximas generaciones comprendan y valoren su herencia cultural y espiritual. Acohace subraya que las festividades tradicionales son un patrimonio invaluable que enriquece la vida comunitaria y familiar.