La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha expresado su preocupación por la reciente polémica en torno a la concesión de una medalla de la Guardia Civil al empresario Aldama, quien se encuentra bajo investigación por supuestas actuaciones contrarias a los valores de la institución. Este caso, según la AUGC, pone en evidencia la falta de transparencia y los cuestionables criterios que rigen la concesión de estas distinciones.
Desde hace años, la AUGC ha denunciado la normativa que regula la entrega de medallas, calificándola como un posible «mercadeo» de condecoraciones. Según la asociación, estas distinciones se otorgan sin la participación ni el conocimiento de los representantes de los guardias civiles, beneficiando a personas externas al cuerpo, como empresarios, políticos, periodistas o responsables de empresas de seguridad privada, sin una justificación clara.
Críticas a una práctica controvertida
La AUGC señala que este tipo de condecoraciones no solo generan malestar entre los miembros de la Guardia Civil, sino que también proyectan la imagen de una «cadena de favores» que contradice los valores que debería representar la institución. Por ello, exige una revisión inmediata de la normativa vigente, proponiendo que las medallas otorgadas a personas ajenas al cuerpo se limiten a casos excepcionales y estén debidamente justificadas bajo criterios de total transparencia.
Además, la asociación considera que estos expedientes deben ser tratados y aprobados en el Consejo de la Guardia Civil, un órgano colegiado donde están representadas las asociaciones profesionales.
El caso Aldama y la postura del ministro del Interior
El caso de Aldama es, según la AUGC, un ejemplo reciente que refuerza la urgencia de cambiar las normativas actuales. Tras la denuncia pública de la asociación sobre la concesión de la medalla a Aldama, el ministro del Interior afirmó que se estudiaría su retirada. Sin embargo, la AUGC recuerda que, con la regulación actual, esta revocación es legalmente imposible.
La AUGC insiste en que las condecoraciones deben ser un reconocimiento al mérito y al servicio prestado, no un instrumento utilizado con fines ajenos al interés institucional.
Compromiso con la transparencia
La AUGC concluye reafirmando su compromiso de trabajar para garantizar que las condecoraciones se otorguen bajo principios de transparencia y justicia. Esto, asegura, no solo beneficia a los guardias civiles, sino que también refuerza la confianza de los ciudadanos en la institución.
La asociación llama al ministro del Interior a liderar un cambio en la normativa que devuelva legitimidad y respeto a estas distinciones.