Los representantes de la delegación de Ceuta de AUGC se han reunido con el senador autonómico del Partido Popular, David Muñoz Arbona, que ha escuchado sus peticiones e inquietudes y se ha comprometido a trasladarlas a los organismos oficiales. Entre las propuesta de la organización está la implantación de las oficinas de Frontex en la ciudad, la eliminación de la excepcionalidad del tratado Schengen y las modificaciones penales para evitar el malestar y la frustración que priman entre el personal
La Delegación de Ceuta de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha mantenido una reunión con el senador de la Ciudad del Partido Popular, David Muñoz Arbona, para tratar sobre las intervenciones y las propuestas que realiza mediante su Grupo Parlamentario demuestran «la preocupación por los Guardias Civiles destinados en Ceuta«. Un ejemplo de ello es el discurso que realizó en mayo durante la Comisión de Interior en la Cámara Alta, a la que asistió el Secretario de Estado de Seguridad.
Desde la AUGC destacan en una publicación que «lo peticionado públicamente por Arbona coincide con lo que solicitamos en numerosas ocasiones: La acusada falta de agentes que sufrimos y la necesidad de que al menos se refuerce la plantilla al menos con 200 Guardias Civiles, la construcción de la nueva Comandancia, la reapertura del Fuerte del Príncipe o la existencia de unos protocolos de actuación que sean claros y que ofrezcan seguridad jurídica ante “rechazos en frontera”. Pero el parlamentario también ha subrayado en ocasiones que hacen falta medios materiales para evitar los problemas que se nos presentan diariamente durante el servicio».
En esta ocasión se tuvieron en cuenta esta serie de circunstancias, pero también se debatió sobre la declaración de la Zona de Especial Singularidad para la Comandancia de la Guardia Civil en Ceuta. Es algo ante lo que el Senador se mostró de acuerdo y sobre la que registró una propuesta por ello, donde denominó a la Ciudad una “Zona de difícil desempeño”. Asimismo, la AUGC le informó sobre la solicitud dirigida a la Dirección General de la Guardia Civil para que reconozca a los efectivos destinados en la Compañía de Seguridad Ciudadana como especialistas de Fiscal y Fronteras.
A continuación, en la reunión se procedió al análisis del último informe del Observatorio de Ceuta y Melilla publicado la semana pasada en relación a Frontex y Schengen.
- La implantación de las oficinas de Frontex en la ciudad serviría para visibilizar más si cabe el carácter europeo de Ceuta y la implicación directa y permanente de la Unión Europea. Sin embargo, desde la AUGC Ceuta defendemos que el Ministerio debe asumir la coordinación con claridad para que no se sucedan invasiones de competencias. Recordamos que la Policía Nacional dispone de las mismas en materia de Extranjería y la Guardia Civil en la vigilancia de Costas y Fronteras.
«Lo referenciamos porque ya ha habido episodios muy tristes. No se pueden repetir sucesos como el acontecido durante una visita oficial de la Delegación de Frontex en agosto de 2016. Un comisario del Cuerpo Nacional de Policía pronunció la famosa frase “En mi despacho mando yo” y fue conocido por todos, ya que ocurrió frente a la prensa acreditada», destacan desde la AUGC.
La organización de guardias civiles remarca públicamente y al senador Arbona «la importancia de que Interior establezca con claridad las competencias para que no surjan situaciones como la de la Operación Minerva. El ahora ex director ejecutivo de Frontex, Gil Arias, llegó a decir en junio de 2021 que las actuaciones fueron suspendidas “porque la Policía Nacional y la Guardia Civil no se ponían de acuerdo sobre quién tenía que dirigir a los guías caninos”. Esto es una muestra del recelo que existe también con Frontex. Ya en julio del año pasado denunciamos la falta de colaboración y cooperación que hubo en Alicante entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado al no querer compartir información con la citada Agencia Europea. También es cierto que no pasan por su mejor momento tras la dimisión de su Director Ejecutivo Fabrice Leggeri por las presuntas negligencias humanitarias de las que se le acusaron».
Por todo ello, consideran que la implantación de las oficinas de Frontex en Ceuta «podría ser un mecanismo eficaz para la gestión de las fronteras y estamos a favor, pero han de ser seguras, eficaces y estar sujetas a la Ley, al derecho internacional, a la transparencia y a las obligaciones en materia de derechos humanos. Las delimitaciones de competencias y funciones no pueden ser ambiguas».
- Con respecto a la eliminación de la excepcionalidad del tratado Schengen, AUGC Ceuta ha comunicado al Senador que es una decisión política de mucho calado. Se tendrán que tener en cuenta muchos factores, entre los principales el económico y sociocultural. El contexto de la Ciudad es diferente a que había cuando se cerró la frontera. Ahora se ha eliminado el comercio atípico y el contrabando; ha desaparecido la figura del «porteador» y el «coche patera» que colapsaban Ceuta. Lo mismo ocurre con el paso fronterizo de Benzú, donde los constantes apedreamientos a los agentes fueron el motivo de su cierre.
«El acceso de mercancías y el contrabando –con el pase de motores de narco lanchas camuflados en bultos de tela a espaldas de los porteadores– es historia. Por lo tanto, la reapertura de Benzú serviría para descongestionar el paso peatonal por la aduana del Tarajal además de ser vía de escape para que los ceutíes tuviesen la opción de disfrutar de la bahía».
Al margen del análisis realizado sobre el informe del Observatorio de Ceuta y Melilla, la AUGC ha referenciado «el malestar y la frustración que genera en los Guardias Civiles las irrisorias penas que conlleva delinquir. La última noticia que ha devuelto ese recurrente sentimiento de desmoralización ha sido la del sujeto que no irá a la cárcel por intentar introducir a un inmigrante en una moto de agua. Fue condenado a cinco meses de prisión, pero quedarán en suspensión de ejecución real. Los agentes ponen en riesgo sus vidas para perseguir a esos traficantes de personas que se lucran ilegalmente con 8.000 euros por cada persona inmigrante que logran introducir al país. Después, cuando son detenidos y dispuestos a disposición judicial, las penas de cárcel son mínimas o incluso tan solo se impone una simple multa».
Desde la AUGC consideran «importante que se impulsen medidas e iniciativas legislativas para que los jueces dispongan de las herramientas necesarias y apliquen condenas ejemplares para este tipo de delitos. Se lo hemos hecho saber al Senador Arbona y hemos incidido sobre este punto dada la importancia de paliar el malestar que prima. En el caso de que fuera necesario, apoyamos la modificación del Código Penal. Hay que desfavorecer todo lo posible la inmigración irregular y los implicados en los hechos criminales tendrían que ser juzgados como autores de trata de seres humanos, donde las penas privativas son de un mínimo de cinco años, más elevadas que las que llevan aparejadas las conductas que favorecen la inmigración irregular».
En la reunión también explicaron que «en todos los casos debería aplicarse el agravante por poner en riesgo a las víctimas. Es vergonzoso e inhumano que los delincuentes proporcionen un chaleco salvavidas al inmigrante para evitar ese agravante en el caso de ser detenidos. Es necesario aplicar una política que persiga la criminalidad con dureza y aumentar las penas para estos delitos de tráfico de personas. Se producen de forma reiterada y hoy en día es una forma de esclavitud».
Tras recoger esta serie de peticiones, circunstancias, reclamaciones e inquietudes que realizó AUGC Ceuta, el senador se ha comprometido a trasladarlas a los Organismos oficiales, por lo que agradecen públicamente David Muñoz Arbona el recibimiento y el tiempo dedicado en escuchar a los representantes de los Guardias Civiles.