La desaceleración que presenta la curva de contagios en las últimas semanas se ha convertido en la principal aliada del tejido empresarial ceutí. La semana que viene, Ciudad y patronal se reunirán para fijar los umbrales que determinarán la aplicación de restricciones aún más severas en actividades no esenciales
El tejido empresarial ceutí puede respirar tranquilo. Al menos durante unos días. El Presidente de la Ciudad, Juan Vivas, ha señalado que, por ahora, no se endurecerán las restricciones sanitarias para las actividades no esenciales. Es decir, no habrá adelanto del horario de cierre ni cierres totales.
No obstante, Vivas ha dejado claro que este aplazamiento no significa que se descarten por completo estas medidas. De hecho, ha adelantado que la semana que viene la Ciudad volverá a reunirse con Cámara de Comercio y Confederación de Empresarios con el objetivo de establecer los umbrales que, en caso de superarse, obligarían a aplicar restricciones todavía más severas.
El presidente ha explicado que la “desaceleración de la curva” ha sido clave para posponer la decisión del Ejecutivo local. En este sentido, ha indicado que en la primera quincena de enero se pasaron de 102 a 402 contagios de covid-19, un crecimiento 205%; en la segunda quincena el aumento fue de 402 a 563, un 40%; y en la tercera, la curva creció tan solo un 11%.
Esta tendencia decreciente ha permitido que el Gobierno de la Ciudad se de una semana más de margen a la hora de tomar una decisión que, como el propio Vivas ha reconocido, podría ser la puntilla definitiva para muchas empresas de la ciudad que sobreviven a duras penas. “Ojalá no sea necesario tomarla”, ha concluido el presidente.