Es una medida en sintonía con el anuncio de suspensión de todos los eventos veraniegos que ya realizó el 11 de mayo el presidente de la Ciudad para garantizar la seguridad y evitar la propagación de la Covid-19. La noche del próximo 23 de junio no se podrá permanecer en las playas a partir de las 21.00 horas
La Consejería de Medio Ambiente y Servicios Urbanos, siguiendo las instrucciones y recomendaciones de la Consejería de Sanidad, Consumo y Gobernación, ha decidido suspender la celebración de la Noche de San Juan, que se celebra del 23 al 24 de junio, y restringir el acceso a las playas a partir de las 21.00 horas de esa jornada, para evitar una concentración que podría ser masiva.
La suspensión de esta fiesta es fundamental para garantizar la seguridad y evitar la propagación de la COVID-19. Se trata, además, de una medida en sintonía con las manifestaciones expresadas por el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, que, en su comparecencia del pasado 11 de mayo, ya anunció la cancelación de cualquier acto o evento, de la naturaleza que sea durante este verano, que implique la aglomeración de personas, por el riesgo que pudiera suponer de un repunte de la enfermedad, y atendiendo siempre a los criterios de prudencia y responsabilidad que dictan las autoridades sanitarias.
Por ello, estará terminantemente prohibido hacer la tradicional hoguera y permanecer en las zonas de baño a partir del horario antes referido. No obstante, sí estará permitido utilizar las playas con normalidad durante el resto de la jornada. Los informadores que la Consejería de Medio Ambiente Ambiente y Servicios Urbanos ha distribuido por las playas para recordar a los usuarios las normas de uso de las playas se encargarán también de comunicar el cierre ese día en horario nocturno. La Consejería, no obstante, precintará los accesos para disuadir a los usuarios que pretendan vulnerar el cierre.
La Ciudad, a través de diferentes consejerías, trabaja en un operativo específico para velar por el estricto cumplimiento de estas instrucciones y asegurar que no se enciende ninguna hoguera o que se realicen celebraciones en las playas ceutíes.
La suspensión de la Noche de San Juan, con la que se suele dar la bienvenida a la estación veraniega, es una decisión que se ha tomado en la práctica totalidad de ciudades costeras españolas ya que, ante la actual crisis sanitaria, no se dan las condiciones necesarias para autorizar dicha celebración.