La gran mayoría de personas adultas con trastornos del espectro autista se encuentra desempleada o subempleada. El secretario general de la ONU aboga por una recuperación económica y social más inclusiva, capaz de «reimaginar» el mercado laboral para que sea más diverso
Según señala la ONU, la pandemia ha venido a agravar «las desigualdades flagrantes en todos los rincones del planeta, especialmente en la distribución de los ingresos y la riqueza, el acceso a la atención sanitaria, la protección ante la ley y la inclusión política». «Esta situación ha afectado especialmente a los grupos más vulnerables o con alguna discapacidad, como las personas con TEA», apunta el organismo.
En el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, que se ha celebrado este 2 de abril, la ONU ha instado a la inclusión de las personas con TEA en la ruta de recuperación económica y laboral que los países se están marcando a raíz de la crisis provocada por la covid-19
“Al trabajar juntos para recuperarnos de la pandemia de COVID-19, debemos fijarnos un objetivo clave, a saber, la construcción de un mundo más inclusivo y accesible que reconozca las contribuciones de todas las personas, incluidas las personas con discapacidad”, ha declarado el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres.
Guterres ha reconocido que la crisis ha generado nuevos obstáculos y desafíos, pero también ha advertido de que, por otro lado, la reactivación de la economía brinda una ocasión de «reimaginar el lugar de trabajo para que la diversidad, la inclusión y la equidad sean una realidad».
Contrataciones discriminatorias
El organismo internacional denuncia que, en el sector laboral, «el problema se refleja en las prácticas de contratación discriminatorias y entornos de trabajo que suponen grandes dificultades para las personas con autismo». En este sentido, Guterres ha destacado que «romper con los viejos hábitos será crucial». «Para que las personas con autismo puedan acceder a un trabajo decente en condiciones de igualdad hace falta crear un entorno propicio y realizar ajustes razonables”, ha remarcado el secretario general de la ONU.
Además, Guterres ha añadido que, si de verdad no se quiere dejar a nadie atrás con la implementación de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, «debemos hacer efectivos los derechos de todas las personas con discapacidad, incluidas las personas con autismo, y garantizar su plena participación en la vida social, cultural y económica».
Nuevos enfoques
Según datos de la ONU, en algunos sectores y grandes empresas se están desarrollando «programas de empleo inclusivo, que dan cabida a las personas con diagnóstico de autismo y afecciones conexas, como el trastorno de déficit de atención o el trastorno obsesivo-compulsivo, a menudo denominadas personas neurodivergentes».
“Trabajemos con todas las personas con discapacidad y las organizaciones que las representan para encontrar soluciones innovadoras que faciliten la recuperación para mejorar y la construcción de un mundo mejor para todos”, ha instado António Guterres.