Hablamos con Juan de Dios Cazorla sobre la importancia que tiene la figura de corresponsal juvenil, labor que ha estado realizando durante los últimos ocho años. «Conoces a mucha gente y tienes mucho apoyo en lo que necesites. Yo hay compañeros que considero casi familia y les agradezco estos años a todos los que he tenido», afirma
La figura de corresponsal juvenil tiene por objeto principal hacer llegar la información institucional sobre cursos, proyectos, programas, actividades, etc., destinados a la población joven a centros educativos, asociaciones de jóvenes, barriadas, etc. Se trata pues de una especie de nexo entre la población joven y las instituciones. Esta tarea se realiza de forma voluntaria.
Nos lo explica Juan de Dios Cazorla, quien ha sido corresponsal en la Casa de la Juventud de Ceuta desde hace ocho años y que ahora ha dejado el puesto para dar paso a savia nueva. Y es que, como comenta el propio Cazorla, el puesto de corresponsal juvenil está reservado para personas de entre 14 y 30 años y él cumplió los 31 recientemente. No obstante, nos comenta que seguirá ligado a la Casa de la Juventud apoyando y echando una mano en lo que haga falta. «La Casa de la Juventud ha tenido un gran detalle conmigo, primero entregándome una placa conmemorativa acompañada de una camiseta y un regalo, y segundo por el hecho de seguir contando conmigo como voluntario», señala.
Para Juan de Dios, una de las ventajas principales del corresponsal juvenil es que «te enteras de todos los cursos que haya, de los programas y proyectos de erasmus, etc.» De hecho, como ya hemos comentado, su función precisamente era hacer llegar esa misma información a su barriada, Santiago Apostol. «Allí tenemos un tablón de anuncios en el que vamos poniendo toda la información que recibimos y aclaramos las dudas que puedan tener. También hay un buzón de sugerencias por si los jóvenes quieren proponer algo», explica.
Pero no es esa la única ventaja para Cazorla: «Conoces a mucha gente y tienes mucho apoyo en lo que necesites. Yo hay compañeros que considero casi familia y les agradezco estos años a todos los que he tenido, pero, especialmente, a Eva, por contar siempre conmigo y por seguir haciéndolo y también a Paco, José, Aida, Vanesa y a la consejera de Juventud y Deporte, Lorena Miranda«, señala el, hasta hace poco, corresponsal juvenil.
Por último, Juan de Dios Cazorla anima a los/as jóvenes que se lo estén pensando a dar el paso y hacerse corresponsales juveniles de sus barriadas, asociaciones, centros educativos, etc. Un trabajo bonito y gratificante que Cazorla deja solo por cuestiones de edad, porque, como nos comenta, piensa seguir ligado a la Casa de la Juventud aunque sea ahora desde otro rol.