Así lo ha vuelto a reiterar la Delegada del Gobierno ante los medios de comunicación, que asegura que mientras la pandemia del coronavirus siga en esta situación la frontera con Marruecos seguirá cerrada
La Delegada del Gobierno, Salvadora Mateos, ha vuelto a ser contundente ante los medios de comunicación: la frontera no se va a reabrir mientras se mantenga la crisis sanitaria del coronavirus.
Ni las protestas, ni la miseria que vive el norte de Marruecos, ni si quiera la crisis económica que está soportando la ciudad autónoma con el cierre de establecimientos y comercios provocados, en gran medida por el cierre de la frontera, van a interferir en la decisión de mantener cerrada la frontera. Será la evolución de la pandemia y, en ultimo extremo, el control de la misma la que marque la ansiada reapertura.
Análisis para comprender las protestas del norte de Marruecos
En este artículo, publicado este domingo en El Foro de Ceuta, se analizan las causas que han llevado a las movilizaciones a miles de personas en el norte de Marruecos.
Según se explica, «después de casi un año de cierre permanente de la frontera con Ceuta y sin haber recibido alternativas por parte de Rabat, el norte de Marruecos se ha levantado contra el Gobierno y el monarca para clamar por soluciones para paliar la situación de miseria en la que se encuentran.
La situación terminó por estallar el viernes, 5 de febrero, cuando una multitud tomaba las calles desoyendo las restricciones sanitarias. Reclamaba alternativas al bloqueo fronterizo o, en su defecto, la reapertura de los pasos que conectan Fnideq y Ceuta. La gendarmería cargó contra la concentración y esa noche hubo disturbios en Fnideq.
Al viernes siguiente, se reprodujeron las protestas pacíficas y esta vez no hubo represión policial. De hecho, durante la última semana, el Gobierno marroquí trató aplacar los ánimos de distintas formas: suspendió condenas a cuatro jóvenes detenidos en los disturbios del 5 de febrero, repartió alimentos de primera necesidad, retomó las obras de la zona franca e incluso ha prometido implementar una ayuda económica mensual a quien acredite tener certificado de trabajo en Ceuta. Nada de eso ha evitado que un tercer viernes, la gente haya vuelto a tomar pacíficamente las calles».
La repatriación de personas atrapadas en Ceuta, más cerca
Tal y como ya confirmó la Delegada hace una semana, hay alrededor de cien personas las que han solicitado irse a Marruecos, “son personas que no quisieron irse porque estaban trabajando aquí, pero ahora han decidido, que llevan aproximadamente un año sin ver a sus familias, y quieren volver a su país”.
Para llevar a cabo esta nueva repatriación, la Delegada ha asegurado que sigue en contacto con las autoridades de Marruecos y que se llevará a efecto esta repatriación «muy pronto«.
En Ceuta, todavía hay personas transfronterizas que desean volver a Marruecos, y que no lo hicieron en las tres anteriores repatriaciones organizadas por el reino Alauita y por la Delegación del Gobierno de Ceuta, donde un total de 268 personas pudieron regresar a sus hogares por un pasillo humanitario.
Aquellas personas interesadas en volver a su país por el nuevo pasillo humanitario deben llamar a los teléfonos habilitados por Delegación del Gobierno: 956.98.45.02; 956.98.45.28 y 956.98.45.21