La controversia generada por la circular que la Dirección Provincial de Educación hizo llegar a los equipos directivos de los centros docentes de Ceuta no cesa. Si la dirección del MEC se reafirmó en el contenido de la misma y defendió su posición en cuanto al carácter lectivo del viernes 21 de diciembre, desde la Junta han respondido que esta llego con poco margen de reacción, entendiendo que ha cambiado la dinámica de «puertas abiertas» de manera abrupta. En el escrito que han elaborado explican su malestar con la cúpula del Ministerio en Ceuta.
«Desde la Junta de Personal Docente, queremos mostrar nuestro desacuerdo con las indicaciones proporcionadas por la Inspección Educativa, que han provocado un final de trimestre tan irregular en los centros escolares de Ceuta.
La Junta de Personal, el profesorado y los equipos directivos de esta ciudad se muestran estupefactos e indignados antes lo insólito de la situación que, una vez más, desprestigia social y profesionalmente a todo el profesorado, como si una actuación que pedagógica y educativamente hablando es irreprochable y que así ha sido asumida por toda la comunidad educativa durante, al menos, las dos últimas décadas fuese una actividad de dudosa utilidad.
Cuestión aparte son las sucesivas notas públicas de la Dirección Provincial que, más que colaborar a apagar la indignación, la dispara con afirmaciones como la que asevera que nadie ha prohibido La Jornada de puertas abiertas, cuando todo el mundo sabe que es imposible compatibilizarla con una jornada lectiva normal.
Son verdades a medias que en nada colaboran a apaciguar el innegable descontento del profesorado.
La jornada de puertas abiertas, el último día de cada trimestre, es una costumbre arraigada en la ciudad, que permite a los padres y madres poder hablar en los IES con varios docentes la misma mañana, y no tener que acudir varios días distintos al centro pidiendo tutoría.
Igualmente, en muchos colegios, es la única manera de poder hablar con los padres y madres, que no aparecen el resto del año. Si un estudio jurídico serio de la situación, realizado por la Dirección Provincial, hubiera dictaminado que “día lectivo” resultaba incompatible con esta práctica, debería haberse decidido a principio de curso, después de un dialogo sereno con los equipos directivos y representantes del profesorado, y no como una imposición apresurada, cuando ya se habían proporcionado al profesorado y las familias, instrucciones de como se entregarían las notas. La Permanente de la Junta de Personal, se personó el mismo viernes 14, para tratar de hallar una solución que pudiera ser la mejor para el profesorado y las familias, sin conseguir que las autoridades académicas modificaran su posición. Seguiremos luchando para que este tipo de situaciones, que perjudican al proceso de enseñanza, no se repitan».
