Los temas que más se trataron fueron la falta de empleo para los jóvenes, el fracaso escolar en la Ciudad Autónoma y la desigualdad, entre otros
Ayer a las 18:30 horas, el Centro Cultural Estación del Ferrocarril acogió la mesa redonda ‘Asociacionismo e iniciativas ciudadanas de la juventud musulmana de Ceuta’. En la charla los participantes eran el representante de la plataforma ‘Unidad Contra la Injusticia’, Abdellah Abdellah Mustafa; de la Asociación de Vecinos de Sidi Embarek, Suhail Tarhawi; de Jóvenes Ya!, Fatima Sohora; de la ONG Luna Blanca, Hanan Salah. Los cuatro moderados por la periodista de El Periódico de Ceuta, Sara Abdelkader.
La mesa redonda se enmarca en el proyecto de investigación y transferencia ‘Asociacionismo e iniciativas ciudadanas de la juventud musulmana de Ceuta’ financiado por el Instituto de Estudios Ceutíes y dirigido por Rafael Camarero, investigador en el Taller de Estudios Internacionales Mediterráneos de la Universidad Autónoma de Madrid.
La investigación se inició a finales del año 2022, siendo su objetivo principal identificar las distintas iniciativas asociativas dinamizadas por la juventud musulmana de Ceuta y analizar su discurso, posicionamiento, actividades y aportaciones.
Durante la mesa redonda lo que pretendía Camarero era que se produjese “una gran conversación en la que distintas personas representantes de la juventud musulmana de la ciudad se encuentren y pongan en común proyectos, reivindicaciones e inquietudes”, que fueron tratados a distintos niveles.
Para empezar, se presentaron los representantes y contaron sus trayectorias personales realizadas con el asociacionismo. En segundo lugar, presentaron las asociaciones y las iniciativas en las que están participando. Además, contaron nuevos proyectos en marcha.
Para finalizar, en el tercer bloque se trataron las cuestiones que preocupan a la juventud de Ceuta, este punto llevó a un ‘caluroso debate’ entre los asistentes sobre el racismo institucional y el que viven a diario los jóvenes musulmanes, como en el entorno educativo, una “realidad oculta” y el alto nivel de paro, entre otros. La iniciativa ha demostrado que los jóvenes musulmanes ceutíes tienen mucho que decir. No se quedan callados ante las injusticias y quieren mejorar su ciudad y que sea un lugar con plena igualdad de condiciones sin discriminar a nadie.