Todos los partidos de la oposición han votado en contra de la modificación de la Ley de Protección del Menor, con la excepción de la abstención de Ciudadanos. Aun así, el proyecto ha tirado hacia delante por la mayoría absoluta del PP. ¿Qué se ha aprobado exactamente?
A grandes rasgos, la Ley de Protección del Menor hace prevalecer el hecho de tener menos de 18 años a la condición de migrante. Y por este motivo, es Ceuta quien asume la responsabilidad del asunto desde sus competencias en Menores y Servicios Sociales.
«Interes superior del menor»
El principal defensor de mantener este punto de vista es el PSOE de Ceuta, quien ha subrayado reiteradamente la supuesta «ilegalidad» de una propuesta que, según ellos, juega en contra del «interés superior del menor«. Sin embargo, el PP ha conseguido esta mañana trasladar Madrid la petición de modificación de la Ley Orgánica para que prevalezca ser migrante sobre ser menor.
«El PP ha promulgado odio»
Un vehemente Juan Luis Aróstegui, representante de Caballas, ha hecho hincapié en un «cambio radical» en la forma de abordar un problema que reconoce. «¿Por qué motivo el centro de menores, encargado por su Gobierno, está en un cajón?», se ha preguntado el diputado. Ha remarcado que las condiciones de La Esperanza «son indignas e indecentes». Por último, Caballas ha querido dejar claro que creen que el PP ha promulgado odio hacia los menores migrantes. Carreira ha negado dos veces esta afirmación.
«Si Ceuta es la guardia de Marruecos es responsabilidad del PP»
Fátima Ahmed ha querido hacer ver que el Gobierno de la Ciudad «está solo» con esta propuesta y que esto demuestra el talante democrático del que tanto presumen en el PP. Ha respondido a Carreira que «si Ceuta es la guardería de Marruecos es por responsabilidad del Partido Popular«.
Acusa al Gobierno local de traer una propuesta en «papel mojado«, a sabiendas de que no saldrán adelante mientras que otros, asegura, «vienen aquí a trabajar por y para los ceutíes, no a hacer el paripé«.
Acusa al Gobierno local de traer una propuesta en «papel mojado«, a sabiendas de que no saldrán adelante mientras que otros, asegura, «vienen aquí a trabajar por y para los ceutíes, no a hacer el paripé«.
Igualmente, ha pedido a Carreira que no «juegue» con los datos, refiriéndose al baile de cifras que existe entre el número de menores atendidos por la Ciudad y el número de menores acogidos por la ciudad – unos 3.800 los primeros contra aproximadamente 400 los segundos-.
«Una propuesta nada preparada»
Javier Varga, por otro lado, ha recomendado al PP que si pretenden modificar una Ley Orgánica, lo hagan en condiciones, presentando una propuesta que no esté plagada de suposiciones y contradicciones. Asegura Varga que la propuesta no está siquiera bien presentada porque desde el PP saben que no va a ir a ninguna parte, de no ser así, la hubiesen presentado antes y mejor estudiada. En última instancia, acusa al PP de pretender venderse ante la ciudadanía como el «abanderado que trae la solución» a una problemática que ellos se han encargado de generar o permitir.
Carreira hace su contra réplica
En su turno de contra-respuesta, Carreira no se ha dejado nada, ni a nadie, en el tintero. Empezaba así explicando a Hernández que el Gobierno de la Ciudad «no trae una propuesta para incumplir la ley, la trae para modificarla. Esto no quiere decir que mientras no se modifica vamos a incumplir la ley actual» Además, aseguraba al secretario general del PSOE en Ceuta que si piden un mayor asunción de competencias por parte del Estado es porque Ceuta no tiene potestad para establecer relaciones internacionales con otros países.
A Juan Luis Aróstegui, diputado de Caballas, le comunicaba que el Partido Popular no siembra odio, menos todavía contra los menores migrantes, según Carreira, ellos señalan a los responsables de la situación de estos menores: sus padres y su gobierno (Marruecos).
Incluso Carreira, ha llegado a hacer una comparativa entre la pretensión histórica de Clara Campoamor exigiendo el voto femenino y la pretensión actual de su Gobierno, en tanto a que ambas pretensiones sonaban descabelladas en su origen.
A Fátima Ahmed, MDyC, le ha recordado que el MDyC ha llevado al pleno muchas propuestas sabiendo que no saldrían adelante y que eso también es hacer política. Con cierta sorna, le ha dicho que ha aprendido mucho en muy poco tiempo, pero que de él «solo ha aprendido lo malo».
Finalmente, a Javier Varga, ha respondido que su propuesta no genera un efecto llamada y que la única vía para acabar con el efecto llamada es que el Gobierno de la Nación y la Unión Europea se pongan firmes con Marruecos y le obliguen a asumir su responsabilidad con los menores.