Agentes de la Policía Nacional han arrestado en Madrid a un fugitivo albanés que figuraba en la lista de los delincuentes más buscados de Europa, conocido por liderar una organización criminal albano-kosovar dedicada al tráfico de drogas. Condenado a más de 29 años de prisión en Bélgica, el detenido tomaba múltiples medidas de seguridad para evitar su captura.
La Policía Nacional ha detenido en Madrid a un fugitivo albanés que formaba parte de la lista de los «Europe’s Most Wanted». El detenido lideraba una organización criminal albano-kosovar, junto con familiares y personas de su entorno cercano, dedicada al tráfico de drogas, cultivo de cannabis y falsificación de documentos. Por estos delitos, fue condenado en Bélgica a más de 29 años de prisión, enfrentándose a 13 cargos diferentes.
Los hechos que desencadenaron la búsqueda del fugitivo tuvieron lugar entre 2014 y 2018, cuando la organización que encabezaba operaba en Bélgica y acumuló una fortuna superior a los 4 millones de euros. La red criminal, altamente estructurada, incluía diferentes niveles jerárquicos: desde jardineros y personal de limpieza hasta responsables de la logística, que se encargaban de alquilar viviendas y vehículos, y la cúspide, donde se encontraban los líderes que coordinaban toda la actividad.
La organización criminal utilizaba documentación falsa para firmar contratos de luz y alquileres, lo que facilitaba el cultivo masivo de cannabis en diferentes inmuebles. Además, reclutaban a personas en situación irregular en el país para trabajar en sus plantaciones. Tras una operación en Bélgica, se desmantelaron más de 13 plantaciones de cannabis y se detuvo al líder, quien posteriormente se dio a la fuga. Las autoridades belgas emitieron tres Órdenes Europeas de Detención y Entrega (OEDE) contra el fugitivo.
En enero de 2023, ante la sospecha de que pudiera encontrarse en España, la Policía Nacional inició una investigación en coordinación con el equipo de FAST Bélgica. La localización del prófugo se complicó debido a sus múltiples medidas de seguridad, que incluían el uso de distintos vehículos y domicilios, así como frecuentes cambios de teléfono móvil.
Finalmente, el 12 de septiembre, los agentes lograron localizarlo en Madrid y montaron un dispositivo para su detención. El arresto se produjo cuando el fugitivo se dirigía a una furgoneta que lo esperaba cerca de uno de sus domicilios controlados.
El detenido ya ha pasado a disposición del Juzgado Central de Instrucción de la Audiencia Nacional, que decidirá su entrega a las autoridades belgas. Este arresto marca un significativo avance en la lucha contra las organizaciones criminales transnacionales y el tráfico de drogas.