En un final de infarto en el Estadio Olímpico de Roma, el Athletic Club cayó por 2-1 ante la Roma en la ida de los octavos de final de la Europa League. El equipo bilbaíno, que jugaba con diez tras la expulsión de Yeray en el minuto 84, encajó el gol definitivo en el último segundo con un disparo de Eldor Shomurodov que deja la eliminatoria cuesta arriba para los leones, obligados a remontar en San Mamés.
El encuentro comenzó con máxima precaución por parte de ambos equipos, en un duelo donde primó la intensidad sobre el espectáculo. La Roma llevó el peso del partido con un activo Paulo Dybala, mientras que el Athletic apostó por la seguridad defensiva y la salida rápida al contraataque. Pese a algunos acercamientos, los porteros apenas tuvieron intervenciones en una primera parte marcada por la dureza en el juego y el criterio desigual del árbitro suizo Sandro Schärer en el reparto de tarjetas.
La segunda parte trajo consigo las emociones fuertes. El Athletic golpeó primero en el minuto 49 con un gol de Iñaki Williams, quien aprovechó un preciso centro de Unai Gómez y un peinado previo de Aitor Paredes para adelantar a los rojiblancos. Sin embargo, la alegría duró poco, ya que apenas seis minutos después, Angeliño firmó el empate con un potente disparo tras un centro desde la derecha.
El partido volvió a convertirse en una batalla táctica, con un Athletic que parecía conformarse con el empate y una Roma que no terminaba de volcarse al ataque. Pero el escenario cambió drásticamente en los últimos minutos cuando Yeray vio la segunda tarjeta amarilla, dejando a su equipo en inferioridad numérica. Con un hombre más, los italianos intensificaron la presión y encontraron su premio en la última jugada del encuentro. Shomurodov, que había entrado desde el banquillo, recibió de espaldas en el área, se giró con rapidez y batió a Julen Agirrezabala con un disparo ajustado al palo, desatando la euforia en la grada local.
Con este resultado, la Roma se lleva una mínima ventaja al partido de vuelta, mientras que el Athletic necesitará el empuje de San Mamés para dar la vuelta a la eliminatoria y seguir soñando en la Europa League. La revancha está servida.
