Las imágenes de voluntarios en Valencia, ayudando a los afectados por la DANA, han conmovido a muchos. Sin embargo, el uso del lema ‘solo el pueblo salva al pueblo’ ha suscitado un debate sobre sus implicaciones políticas. Según Cristina Monge, politóloga de la Universidad de Zaragoza, este tipo de mensajes puede aumentar la desconfianza en las instituciones públicas.
El profesor Juan M. Zaragoza advierte que ciertos movimientos políticos intentan capitalizar este descontento para deslegitimar al Estado. La frase, aunque refleja solidaridad, puede ser peligrosa si se utiliza para oponer al pueblo contra las instituciones.
Importancia de las Instituciones Públicas
Monge señala que la desconfianza en las instituciones puede tener consecuencias prácticas, como ignorar alertas de Protección Civil. Las instituciones son esenciales para coordinar respuestas efectivas en situaciones de crisis. El problema surge cuando se ve al pueblo como opuesto a cualquier representación política.
Colaboración entre Voluntarios e Instituciones
Desde Contra el Diluvio, se enfatiza la necesidad de reforzar tanto las estructuras estatales como las de apoyo mutuo. La intervención del Estado no es incompatible con la acción ciudadana; ambas son necesarias y complementarias.
Durante la pandemia, se observó que la primera ayuda en llegar es la de los vecinos. Sin embargo, las organizaciones establecidas son más eficaces a largo plazo. Incentivar el tejido asociativo es crucial para una respuesta eficaz ante emergencias.
Reflexiones Finales
La desconfianza hacia las instituciones no es nueva y se ha visto exacerbada por la incapacidad de estas para responder a las necesidades ciudadanas. Aprovechar el descontento actual para impulsar un programa ambicioso de adaptación al cambio climático es esencial.
En conclusión, mientras que la solidaridad ciudadana es vital, no debe sustituir la función del Estado. La colaboración entre ambos es fundamental para enfrentar futuras crisis de manera efectiva.