Tanto la Selección Sub-16 de Ceuta como la Sub-18, que se encuentran disputando la 2ª fase del Nacional de fútbol en Las Palmas, cayeron antes sus homólogas madrileñas. Pese a ello, las dos escuadras hicieron un papel más que digno frente a las selecciones madrileñas, que son, hablemos de la categoría que hablemos, unas de las selecciones más temibles.
La Sub-16, hasta el minuto 78 tuvo el empate en sus manos, fue en ese momento cuando el empuje del cuadro oriundo de la meseta consiguió abrir brecha en la zaga ceutí e inaugurar el marcador. Ese iba a ser el único gol del encuentro, muy a pesar de los cadetes blanquinegros que, insistimos, pese a perder el partido, dejaron muy buenas sensaciones. A pesar del resultado, el cuadro caballa dio muestras de tener las ideas muy claras. Competía cada balón con una intensidad irreprochable y se posicionaba muy bien en el campo. Pero la fortuna no estaba de parte de los ceutíes, pues el gol llegó tras un lanzamiento de córner algo embarullado.
En el caso de la Sub-18, el cuadro ceutí hizo un partido muy serio, pese a verse pronto con un gol en contra. Los caballas supieron sobreponerse y consiguieron poner tablas en el marcador antes del descanso. En la segunda mitad, los juveniles de Ceuta se defendieron cual gato panza arriba ante la selección de la capital que salió con todo a por el partido. Cosas del fútbol, el gol llegó a balón parado, de falta directa. En los minutos finales, fruto de haberlo dado todo, la selección ceutí comenzó a dar muestras de cansancio. No era para menos. Así, en el minuto 85 llegaba los madrileños ponían la puntilla al encuentro con el 3 a 1.
Estos dos resultados negativos seguro que deja en los jugadores de las dos selecciones caballas un sabor amargo. Como competidores querrían haber ganado y no hay consuelo en la derrota. Pero cualquier ceutí aficionado/a al fútbol estará hoy orgulloso del papel desempeñado por los jóvenes de Ceuta.