LALIGA, la Oficina Nacional de Deportes (OND), la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y la Asociación Española de Médicos de Equipos de Fútbol (AEMEF) han establecido un nuevo protocolo de comunicación para gestionar emergencias en los estadios de fútbol, que se implementará a partir de la temporada 2024-25. La figura del enlace de terreno de juego y el refuerzo de los dispositivos sanitarios son algunas de las medidas destacadas.
En una iniciativa conjunta, LALIGA, la Oficina Nacional de Deportes (OND) de la Policía Nacional, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y la Asociación Española de Médicos de Equipos de Fútbol (AEMEF) han acordado un nuevo protocolo de comunicación para la gestión de emergencias en los estadios de fútbol profesional. Este protocolo, que entrará en vigor en la temporada 2024-25, busca mejorar la seguridad de los aficionados y jugadores, asegurando una respuesta rápida y eficaz ante cualquier incidente.
Entre las novedades más relevantes se encuentra la creación de la figura del «enlace de terreno de juego». Este rol estará a cargo de un miembro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, quien se ubicará a pie de campo en contacto directo con la Unidad de Control Organizativo (UCO) y con el equipo arbitral. Este enlace garantizará un flujo de información constante y preciso durante el desarrollo de los partidos, especialmente en situaciones de emergencia.
Además, se reforzará el dispositivo sanitario presente en los estadios, introduciendo la figura de los «médicos de grada», responsables de brindar la primera atención médica a los espectadores. El protocolo también incluye, por primera vez, la emisión de mensajes de emergencia a través de megafonía y videomarcadores, para mantener informados a los asistentes en tiempo real.
Este acuerdo es el resultado de varias reuniones de trabajo entre las instituciones involucradas y del I Congreso de Tecnificación y Gestión de Emergencias en estadios de fútbol, organizado por LALIGA y Cruz Roja el pasado mes de abril en el estadio del RCD Espanyol. El objetivo principal de estas medidas es garantizar un entorno seguro y protegido en los estadios, permitiendo que los diferentes profesionales —desde los cuerpos de seguridad hasta los sanitarios y árbitros— puedan actuar de manera coordinada y eficaz en caso de emergencia.
Con la implementación de este protocolo, las instituciones buscan mejorar la capacidad de respuesta ante incidentes que puedan afectar tanto al público como al desarrollo de los partidos, asegurando así la seguridad de todos los involucrados en los eventos deportivos.
