Más de 650 ciclistas pedalean en estos momentos las calles de Ceuta. Bicicletas de rueda gruesa, tacos de montaña y amortiguadores de palmo y medio. Auténticas máquinas cabalgadas mayoritariamente por hombres, aunque este año se ve un aumento considerable de mujeres. Todos los vehículos han estado custodiados toda la noche en el mismo recinto de las Murallas.
Los y las deportistas se enfrentan a dos subidas de casi 300 metros. El paisaje de Ceuta hace de los repechos auténticos rompe-piernas, habiendo dos subidas que arrancan casi del nivel del mar para soportar el ascenso en 3 kilómetros. Aún así, a estas horas las primeras bicicletas están terminando la prueba.
En la salida no se han lamentado incidentes, habiendo un ambiente de competitividad respetuosa. La curva de salida de las murallas reales ha sido constante, sin que los y las ciclistas tuvieran que poner el pie en el suelo. Ceutíes, familiares y amistades están animando a lo largo del circuito a los y las deportistas, que tienen cuatro horas como máximo para completar los casi 60 kilómetros.