Los niños con necesidades educativas especiales son los que más sufren la falta de personal en los centros educativos ceutíes. Así lo cuenta la madre de un niño ceutí de 6 años con TEA, que estuvo dos semanas sin ir al colegio tras un episodio que provocó el miedo y la inseguridad en las familias, que reclaman atención individualizada como un derecho de estos niños
La madre de un niño de 6 años con trastornos del espectro autista (TEA), que está escolarizado en 2º de Primaria en el Colegio Andrés Manjón, quiere hacer un llamamiento al Ministerio de Educación y Formación Profesional para que solucionen su problema: su hijo ha estado dos semanas sin poder ir al colegio porque no tiene cuidadora.
Lo hace en nombre de las ocho familias que tienen hijos con TEA en este centro educativo ceutí, donde solo hay una cuidadora para atenderlos a todos, lo que impide que los niños “puedan avanzar en el primer trimestre”, ya que hasta diciembre con los planes de empleo de la Delegación del Gobierno no habrá personal de apoyo. “Necesitamos más seguridad para nuestros niños, no estamos tranquilos cuando los dejamos en el colegio”, declara.
La familia decidió dejar de llevar al colegio a su hijo después de un desagradable episodio: durante una de sus clases el niño se asomó por la ventana de clase, que no tenía rejas, y casi se precipita. Estos hechos fueron trasladados al consejero de Educación de la Ciudad Autónoma, Carlos Rontomé, quien tomó las medidas oportunas con carácter de urgencia para que se instalaran esas rejas de seguridad, por lo que el pequeño ha podido volver a clase.
“Estos niños tienen que seguir una rutina y no les viene nada bien estas cosas”, explica la madre, que agradece la rápida actuación en la instalación es de las rejas pero insiste en la importancia de contar con una cuidadora porque necesita “atención individualizada”. También han trasladado su queja a la Dirección Provincial del MEFP, pero no han obtenido solución.
“Siempre tenemos este problema, pero este año la gota que ha colmado el vaso es que los planes de empleo no llegarán hasta diciembre. Ahora mismo se han incorporado los 17 cuidadores del plan del Ayuntamiento pero estos van a los colegios más necesitados como el San Antonio”, relata esta madre desesperada. Y es que asegura que en el Andrés Manjón hay ocho niños con TEA y solo una cuidadora.
“Es un derecho que tienen nuestros niños y vemos inhumano que estén en las aulas sin una atención individualizada”, indica esta madre, en nombre de todas las familias del colegio que sufren lo mismo.
Además, apuntan que estos niños llevan matriculados desde hace tiempo, en concreto este caso lleva cuatro años en el colegio, y el Ministerio de Educación debería tenerlos en cuenta desde el inicio del curso. Otro ejemplo es que había dos profesoras de “audición y lenguaje” en el colegio y este año solo hay una, por lo que no todos los niños pueden tener acceso a esas sesiones. “Esto tendría que estar solucionado ya, tenemos año tras año los mismos problemas”, lamenta esta madre, que espera que algún día estos niños sean escuchados y sus necesidades atendidas.