Hoy ha hecho escala en el Muelle España de Ceuta el BAM (Barco de Acción Marina) «Furor». Se encuentra realizando un crucero de resistencia tras finalizar el periodo de evaluación operativa de sisteas (EVALO) en aguas de Cartagena y Rota.
El buque ha sido recibido por el Comandante Naval de Ceuta, capitán de navío Francisco Cornago Diufain, y diversos miembros de dicha Comandancia. El BAM “Furor” estará en la ciudad autónoma de Ceuta hasta el próximo martes 28 de mayo, cuando zarpará de nuevo poniendo rumbo a Sevilla.
Pretende arribar allí el próximo 30 de mayo, tras remontar el río Guadalquivir, para participar en los actos previstos durante el Día de las Fuerzas Armadas que se celebrará el día 1 de junio en la ciudad hispalense. Durante su estancia en Ceuta realizará un homenaje a los caídos del dragaminas ‘Guadalete’ en el muelle “España”, buque de la Armada Española con base en Ceuta que se hundió en aguas del Estrecho en 1954 tras sufrir
un fuertísimo temporal de levante. También servirá de puerto de descanso para la dotación.
Fotos de Antonio Sempere
El BAM «Furor»
El ‘Furor’, cuya botadura tuvo lugar el 8 de septiembre del 2017, es el segundo de los dos buques de la extensión de la primera serie del programa BAM de la Armada Española. Fue entregado a la Armada el pasado 21 de enero en Ferrol (La Coruña). Estos buques son un modelo de construcción totalmente español y han destacado por su excelente rendimiento en las agrupaciones internacionales en las que se han integrado, demostrando su eficacia y operatividad en los escenarios más exigentes.
El “Furor” al igual que sus antecesores, cuenta con 93,90 m de eslora, está dotado de las más modernas prestaciones, cubierta de vuelo y tiene una autonomía de víveres para 35 días. El sistema integrado de control de plataforma de última generación está desarrollado por “Navantia Sistemas” y permite su operación con una dotación reducida, concretamente 52 hombres y mujeres.
Los buques de la clase BAM son plataformas versátiles y con un elevado número de capacidades, movilidad estratégica, interoperables y con gran autonomía logística gracias a su bajo consumo de combustible y elevada capacidad de tratamiento de residuos a bordo, lo cual le permite cumplir con todas las misiones genéricas encomendadas a la Fuerza de Acción Marítima.
Están concebidos para llevar a cabo misiones de seguridad marítima (MSO) de carácter militar, contra amenazas asimétricas o convencionales en escenarios de baja intensidad, y de colaboración con otras instituciones y organismos con responsabilidades en la Acción del Estado en la mar. Entre las operaciones encuadradas dentro de su perfil de misión, destacan el control del tráfico marítimo, las Operaciones de Interdicción Marítima (MIO),
protección y escolta del tráfico mercante, las operaciones NEO (evacuación de personal no combatiente en zonas de conflicto), la lucha contra el narco- tráfico, la vigilancia y control de legislación medioambiental, y la vigilancia y control de legislación de pesca.
El buque se encuentra igualmente preparado para llevar a cabo misiones de proyección de unidades de guerra naval especial, salvamento, lucha contra la contaminación marina y mando en operaciones contra minas. También puede desarrollar actividades de formación, instrucción y adiestramiento, así como ejercicios con otros países o misiones de apoyo a actividades de carácter diplomático o industrial.