La presión estalló en el estadio Larbi Zaouli de Casablanca luego de que el Wydad Athletic Club sufriera una contundente derrota por 4-1 ante el Moghreb Fes, en el marco de la 16ª jornada del Campeonato Nacional Profesional “INWI” de la primera división marroquí. El resultado no solo dejó consecuencias en la tabla de posiciones, sino que desató un episodio de violencia por parte de los aficionados contra los propios jugadores del equipo local.
Un partido marcado por la expulsión temprana
El encuentro comenzó cuesta arriba para el Wydad cuando, en el minuto 11, Ismail Benqtib fue expulsado, dejando a su equipo con diez jugadores durante prácticamente todo el partido. A pesar de que Mohamed Rayhi adelantó al Wydad con un gol en el minuto 21, el equipo no pudo sostener la ventaja.
El Moghreb Fes aprovechó la superioridad numérica y respondió con contundencia. Kabelo Sikaning empató en el minuto 39, mientras que Mohamed El-Badawi, con dos goles en los minutos 76 y 90+9, y Hamid Ahdad, en el minuto 82, sellaron la victoria para los visitantes.
Con este resultado, el Moghreb Fes subió al quinto lugar de la clasificación con 25 puntos, mientras que el Wydad Athletic Club cayó al sexto lugar con 24 puntos, incrementando la frustración de sus seguidores.
Violencia en las gradas y agresiones a los jugadores
Tras el pitido final, la tensión en las gradas se transformó en una serie de agresiones por parte de los aficionados del Wydad contra sus propios jugadores. Insultos, abucheos y el lanzamiento de botellas hacia los futbolistas marcaron el amargo cierre del partido.
Los jugadores tuvieron que retirarse bajo una fuerte escolta para evitar que la situación escalara aún más. Este comportamiento por parte de la afición pone de manifiesto la presión y el descontento que atraviesa el equipo, que no logra responder a las expectativas de su hinchada.
Preocupación por la seguridad y las consecuencias disciplinarias
Este incidente ha generado preocupación tanto en el club como en la liga, ya que pone en evidencia problemas de seguridad y el deterioro en la relación entre los jugadores y la afición del Wydad. Se espera que las autoridades competentes tomen medidas para investigar lo ocurrido y garantizar que este tipo de actos no vuelvan a repetirse.
Por su parte, el Wydad Athletic Club afronta un momento crítico, tanto en lo deportivo como en su vínculo con los seguidores, lo que plantea grandes desafíos para el cuerpo técnico y los dirigentes en el resto de la temporada.